Riesgo de que se incumplan la reformas aprobada en 2004, señala el patronal CCE

La renuncia de Levy genera desconcierto en el Congreso

La renuncia de Santiago Levy a la dirección del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) causó ayer reacciones encontradas. Por un lado, algunos sectores políticos y empresariales externaron preocupación por la "debilidad del gobierno federal ante los trabajadores", la "inestabilidad" en el gabinete presidencial y el eventual riesgo de que se incumplan las reformas aprobadas en esa institución en 2004, mientras otros festejaron y calificaron la decisión de "apertura del gobierno federal" que coadyuvará a lograr un acuerdo entre el sindicato y la institución.

En el Senado de la República, los priístas Humberto Roque y Emilio Gamboa advirtieron que el relevo representa "debilidad" del gobierno del presidente Vicente Fox ante las "presiones de los trabajadores, situación que es muy peligrosa y no debería ocurrir", en tanto que el mensaje que se envía a la sociedad sugiere que "no hay consistencia en el gobierno".

Roque advirtió que desde un principio varios legisladores mostraron duda sobre la consistencia de la gestión foxista para resolver el problema de las pensiones en el IMSS, lo cual "obligó a un esfuerzo adicional en el Congreso (para aprobar las reformas en 2004), el cual ahora va a quedar en entredicho".

Gamboa dijo que le preocupaba mucho la renuncia de Levy, porque significa "que las presiones no se puedan resolver de parte del gobierno, con negociación y diálogo". Su preocupación, dijo, radica en que se dice que Levy renunció porque lo obligaban a firmar un contrato colectivo de trabajo que rebasaba las instancias legales.

El presidente de la Comisión de Salud y Seguridad Social del Senado, el perredista Elías Miguel Moreno Brizuela, dijo que la renuncia "muestra la debilidad del gobierno de Fox. Me parece desacertado, y esto ocurre en medio de la peor crisis del IMSS en el sexenio".

Paradójicamente, el Comité Ejecutivo Nacional del PRD consideró que la dimisión permite tender los puentes necesarios para lograr un acuerdo entre el IMSS y el Sindicato Nacional de Trabajadores del Seguro Social (SNTSS), y así evitar el estallido de una huelga. El PRD no pasó por alto el deterioro financiero del IMSS, causado "no por el régimen de pensiones y jubilaciones", sino por el abandono del gobierno y los altos ingresos de los funcionarios, como Levy, quien percibía 213 mil pesos mensuales, salario ocho veces mayor al de un médico, además de que nunca renunció a los privilegios de su cargo, pero "sí encabezó una campaña de desprestigio contra los trabajadores".

El líder nacional del PRI, Mariano Palacios Alcocer, indicó que la salida de Levy demuestra que la inestabilidad ha tocado algunos puntos de la República, como el gabinete presidencial.

El coordinador de la bancada del PAN en la Cámara de Diputados, José González Morfín, hizo un llamado a los distintos actores políticos del país para trabajar a fondo para "salvar" a la institución. Dijo que tras la renuncia de Levy en el IMSS, deben ser revisados los temas de las pensiones y del contrato colectivo de trabajo en función de la permanencia del IMSS.

El PVEM calificó de "grave" que Fox aceptara la dimisión de Levy por la presión que ejerció el SNTSS.

La cúpula empresarial advirtió que con la salida de Levy se corre el riesgo de que no se cumplan las reformas aprobadas en 2004, lo que "representaría un retroceso en el saneamiento y modernización del organismo, así como un mayor detrimento de la calidad de los servicios para los millones de los trabajadores que pagan puntualmente sus cuotas".

José Luis Barraza, presidente del Consejo Coordinador Empresarial, destacó que en ese sector hay preocupación, pues el relevo se da en el momento en que ocurren las negociaciones contractuales entre el SNTSS y el IMSS, y cuando deberían entrar en operación las reformas a la ley del IMSS, aprobadas por el Congreso.

Cualquier intento de echar atrás esas reformas, dijo, "sería una señal pésima", porque no se modernizaría la institución, ni se resolvería el régimen de jubilaciones y pensiones que "ha provocado un deterioro permanente de los servicios en momentos en que las condiciones financieras (del IMSS) son cada vez más malas".

Para impedir una crisis mayor en el instituto, el presidente de la Cámara de Comercio capitalina, Manuel Tron Campos, exigió "firmeza" al Ejecutivo federal, al Congreso, empresarios y trabajadores.

En Jalisco, Francisco Castillo, líder de la sección 3 del SNTSS, dijo que la llegada de Flores Pérez representa una "apertura del gobierno federal, porque se ofrecen a los trabajadores condiciones para el diálogo".

En Morelos, la titular de la sección 19 del SNTSS, Silvia Irra Marín, comentó que la dimisión de Levy aún no disipa una eventual huelga y tampoco resuelve de fondo el conflicto que enfrenta la institución.

Víctor Ballinas, Matilde Pérez, Ciro Pérez, Claudia Herrera, Miriam Posada y Antonio Castellanos, reporteros; Nelda Judith Anzar, corresponsal, y La Jornada Moreloss