La UE podría ayudar a Marruecos a reforzar fronteras
España construirá otra "valla de emergencia" en Melilla y Ceuta
Madrid, 4 de octubre. España instalará de "urgencia" una tercera valla metálica en la frontera entre el enclave de Melilla y Marruecos, para impedir los asaltos masivos de inmigrantes que intentan así pasar al lado español.
Al anunciar la construcción de esta valla de seguridad, que estará dotada de un moderno sistema de vigilancia, el delegado del gobierno español en Melilla, José Fernández Chacón, reconoció la situación de emergencia en la zona.
A su vez, el ministro del Interior, José Antonio Alonso, anunció la intensificación de medidas "disuasorias", entre ellas el reforzamiento de los efectivos policiales en la frontera y de la cooperación con el régimen de Marruecos.
Asimismo, la Comisión Europea anunció el envío de una misión técnica para estudiar el problema y frenar la "avalancha de inmigrantes", a pedido de España.
El comisario europeo de Seguridad, Franco Frattini, indicó que la UE está dispuesta a otorgar también al gobierno de Marruecos unos 40 millones de euros para ayudarle a controlar sus fronteras, pero deberá aceptar el regreso de indocumentados antes de fin de año.
Melilla y el otro enclave español de Ceuta están separadas del norte de Marruecos por dobles barreras metálicas que inmigrantes intentan pasar a la fuerza y en masa, por lo que las autoridades españolas aceleraron en los últimos días el trabajo para elevar los muros de tres a seis metros de altura, que terminan en alambres de púas, equipados además con detectores de movimientos y cámaras infrarrojas.
Pero estos trabajos no impidieron que el lunes 350 indocumentados lograran entrar en Melilla en dos lugares en los que la barrera ya era de seis metros.
La ampliación de la muralla aumentó la desesperación de los miles de africanos que viven hacinados en territorio marroquí, a la espera de una oportunidad para cruzar la frontera hacia España.
Los migrantes africanos idearon un nuevo método para alcanzar su sueño: saltar la valla en forma masiva y de madrugada, pero la mayoría de las veces han sido repelidos con violencia por las policías española y marroquí, que en las últimas semanas se ha saldado con la muerte de nueve personas.
Al respecto, Amnistía Internacional denunció que el número de migrantes que murieron o que fueron gravemente heridos al parecer a consecuencia de malos tratos o del uso de fuerza excesiva por los agentes del orden españoles y marroquíes, aumentó considerablemente en los últimos meses.
Además, indicó, en las redadas que llevaron a cabo las fuerzas de seguridad marroquíes en los últimos tres días en los campamentos improvisados, detuvieron a unos 400 migrantes, aparentemente por encontrarse ilegalmente en el país.
Así, 70 por ciento de españoles favorece el despliegue del ejército en Ceuta y Melilla, y la existencia de vallas para frenar a los indocumentados, reveló un sondeo de la radio privada Cadena Ser.
Mientras que 80 por ciento piensa que entran demasiados inmigrantes a España, y 90 ciento estima que Marruecos no hace lo necesario para frenar la inmigración.
Por lo pronto, los 350 inmigrantes africanos detenidos pasaron la noche a la intemperie y en condiciones infrahumanas ante la saturación de los centros públicos y las tiendas de campaña levantadas por el ejército español y la Cruz Roja en Ceuta y Melilla.