No estamos vacunados de estas prácticas: Alvarez
Acarreo y operación cochinita, denuncias de Creel y Calderón
Acarreo, coacción del voto, entrega de despensas, amenazas de despido y la operación cochinita (los electores fueron invitados a desayunar tacos de cochinita pibil para que sufragaran en favor de algún precandidato), fueron denunciadas en los expedientes que presentaron los equipos de los aspirantes presidenciales Santiago Creel y Felipe Calderón ante la Comisión de Elecciones panista.
La presidenta del órgano electoral, María Elena Alvarez, señaló que estas prácticas ''ilícitas'' demuestran que el PAN no está vacunado de repetir prácticas del pasado, y para evitarlo en la tercera etapa y en futuras elecciones se aplicarán sanciones ejemplares a los responsables, incluidos los gobernadores, si fuera el caso, aunque reconoció que será difícil demostrar estas anomalías.
Descartó que la impugnación que hizo Creel al proceso en Yucatán altere los resultados que favorecen a Calderón, quien ocupa el primer lugar con 48.13 por ciento, frente al ex secretario de Gobernación, con 36.17. Señaló que los creelistas no pidieron la anulación de todas las casillas, sólo la revisión de los hechos. ''Los resultados están firmes y sólidos, y el hecho de que el mismo equipo de Creel no pida la anulación quiere decir que no tiene elementos para solicitarla'', indicó.
En entrevista con La Jornada, Alvarez, quien funge como árbitro de la contienda y está cerca de cumplir medio siglo de militancia en el PAN, explica:
''La comisión actuará enérgicamente y se propone dar una resolución sobre estas denuncias la próxima semana, para evitar que se repitan en la próxima elección (del 23 de octubre). Son situaciones que no ponen en riesgo la transparencia ni la validez del proceso, pero son un llamado de atención de las conductas que imperan en la cultura política del país'', afirmó.
El miércoles pasado, los equipos de Calderón y Creel se acusaron mutuamente de haber cometido una serie de irregularidades en la segunda votación. Los creelistas impugnaron todo el proceso de Yucatán, y los calderonistas nueve casillas de Tantoyuca, Veracruz, y tres de Oaxaca. Con esta decisión, ambos aspirantes destaparon una serie de irregularidades que en su momento fueron documentadas por los medios de comunicación, pero que todavía el día de la votación fueron desestimadas por la Comisión de Elecciones y guardadas por los representantes de los los equipos de campaña.
Alvarez dijo que está satisfecha de los resultados, aunque lamentó el comportamiento de algunos panistas.
-¿Qué prácticas se denunciaron?
-Coacción del voto, por ejemplo, con el obsequio de despensas, oferta de puestos o de que los sigan conservando. En Yucatán nos dijeron que hubo operación cochinita en tres lugares, donde les ofrecían tacos y los llevaban a votar, lo cual puede ser un ilícito o no, porque posiblemente los llevaron libremente a votar.
-¿Estas denuncias ponen en riesgo la legitimidad del proceso?
-Lo que pone en cuestión es la educación cívica del pueblo. Estos comportamientos son muy reprobables y se aplicarán sanciones según el grado de la falta, que pueden ser la amonestación, la exclusión del partido o la inhabilitación para ocupar cargos públicos.
-Usted tiene una larga militancia en el PAN y en su partido estas prácticas siempre se han cuestionado...
-El PAN se había comportado de una forma mientras no tenía que ejercer el poder federal, y vemos que hay muchos mexicanos que tienen una cultura sólida y que el partido ha incidido en formarlas y hay numerosos mexicanos que traen todavía una formación que el sistema le dio por 70 años. Pero no son conductas generalizadas.
-¿Esto significa que no están vacunados de las prácticas que tanto criticaron?
-Esto es lo que debemos concluir. El país no está dividido en buenos y malos. Todos podemos fallar. El PAN tiene que cuidar que no fallen sus miembros.