Tercer día consecutivo de precipitaciones

Seguirá la alerta preventiva hasta que cesen lluvias

En riesgo, 5 mil familias de seis delegaciones

Encinas: monitoreo permanente en 199 puntos

Arboles caídos, encharcamientos y caos vial

Por tercer día consecutivo continuaron las lluvias en el valle de México, por lo que el Gobierno del Distrito Federal y las 16 delegaciones políticas mantendrán la alerta preventiva por riesgos hidrometeorológicos hasta que cesen los efectos de la depresión tropical Stan y ante el peligro de deslizamientos de tierra, como el que ocurrió en el kilómetro 24 de la carretera México-Toluca sin mayores consecuencias.

El jefe de Gobierno capitalino, Alejandro Encinas, señaló que se realizan monitoreos en los 199 puntos de alto riesgo ubicados en laderas, barrancas y cauces de ríos, pero hasta el momento no ha sido necesario realizar ningún desalojo. Indicó que se encuentran habilitados 13 albergues próximos a estas zonas con capacidad para dar refugio a unas 7 mil personas.

Informó que además de las afectaciones viales y encharcamientos en varias delegaciones, se reportaron ocho árboles caídos en Tlalpan, Miguel Hidalgo, Gustavo A. Madero, Cuauhtémoc, Azcapotzalco y Benito Juárez.

Reticencia de habitantes

Luis Wintergerst Toledo, director general de Protección Civil, mencionó que en la zona sur-poniente, que comprenden las delegaciones Milpa Alta, Tláhuac, Xochimilco, Magdalena Contreras, Cuajimalpa y Alvaro Obregón, se encuentran en riesgo 5 mil familias que se niegan a abandonar sus hogares y pertenencias, aun cuando se les notificó del peligro que corren.

Al concluir la comparecencia del secretario de Gobierno, Ricardo Ruiz Suárez, ante la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, el funcionario mencionó que según las cifras del Programa de Mitigación de Riesgos Hidrometeorológicos 2005, habitan en asentamientos irregulares de alto riesgo, como laderas, pendientes pronunciadas y cauces de ríos, 28 mil 176 personas.

Por ello, desde hace 72 horas se mantienen en alerta las unidades de protección civil, para actuar de inmediato y mitigar los riesgos, pues se registra una precipitación pluvial de 31 milímetros en promedio, que es bastante, indicó.

Comentó que a lo largo del día se reportaron encharcamientos, que en algunos casos llegaron a los 50 centímetros de altura, como en Insurgentes Norte y avenida Ticomán, provocando problemas de tránsito.

"No existe ningún aumento en el afluente de las presas, pero siempre hay que poner atención a todo lo que se mueve y lo que no se mueve en la ciudad", dijo.

En este contexto, el pleno de la ALDF aprobó un punto de acuerdo para exhortar a la Dirección General de Protección Civil, que encabeza el propio Wintergerst, a elaborar un programa de contingencia ante un eventual colapso del drenaje profundo, que perturbe su funcionamiento.

La situación en las delegaciones

En Gustavo A. Madero, las autoridades iniciaron un operativo de prevención en zonas donde habitan cerca de 20 mil personas. El director de Protección Civil de la demarcación, Alejandro Lluvere Sevilla, informó que estos sitos se localizan en las laderas del cerro del Chiquihuite y los cauces de los ríos Temoluco y Maximalaco.

Por medio de brigadas y monitoreos, personal de las direcciones territoriales y de protección civil identifican los puntos rojos, dijo el funcionario, y precisó que hay 100 familias asentadas en un predio irregular conocido como La Parva, el cual es uno de los principal sitios de atención porque la zona es de reserva ecológica y existe peligro de que se desgaje; sin embargo, las familias se niegan a salir.

Pese a que no se han reportado incidentes graves, las acciones se iniciaron esta semana y 30 personas de la DGPC, en coordinación con trabajadores de las 10 direcciones territoriales, realizan recorridos.

En los límites de Alvaro Obregón, Cuajimalpa y Magdalena Contreras, a tan sólo unos pasos del río Texcalatlaco, las 40 familias que habitan en el paraje Las Peñitas, considerado uno de los puntos de más alto riesgo por las lluvias, se mantienen en alerta para enfrentar cualquier contingencia derivada de los remanentes de Stan.

En el predio, donde se han hecho edificaciones en las laderas de los cerros y las veredas, se han formado escalinatas con costales rellenos de arena, la mayor preocupación de los pobladores es que pueda ocurrir algún deslave por la noche, porque no cuentan con alumbrado público que les permita agilizar el desalojo.

En un recorrido por el lugar, la representante de la colonia Loma Ampliación de Tlacoyaque, Ifigenia Rentería, señaló que aunque se sienten un poco más tranquilos, porque en los últimos años se han construido muros de contención en la zona, "estamos al pendiente, porque todavía hay muchas casas con techos de cartón".

Ifigenia reside en la parte más alta del predio y es la encargada de monitorear uno de los cuatro pluviómetros que colocaron las autoridades de protección civil en la delegación Alvaro Obregón, y de hacer tañer una campana para emitir la señal de alerta a todos los vecinos en caso de una urgencia. "En una bitácora voy apuntando la hora en que empezó a llover y cuántos milímetros se acumularon de agua. Pero si es lluvia fuerte con granizo, hablo luego luego a Protección Civil para que me den instrucciones", pero en esta temporada de lluvias no ha habido necesidad de ninguna evacuación.

Sin embargo, el temor entre los pobladores es evidente. Zenaida Pérez Olivares, quien habita en las faldas de un cerro cerca de las márgenes del río Texcalatlaco, recuerda que hace dos años hubo un deslave que provocó que el corredor frontal de su casa se viniera abajo, entre el lodo y los costales de arena. "Nunca vamos a tener tranquilidad, y menos cuando vemos lo que está ocurriendo en Chiapas."

Persiste el peligro

Otro escenario se vive en la colonia Hogar y Redención, donde habitan 400 personas en las márgenes del río Mixcoac. De acuerdo con el director de Protección Civil y Zonas de Alto Riesgo de la demarcación, Genaro Israel Anita Gutiérrez, el año pasado se reubicó a 11 familias asentadas en un perímetro de 2 mil 500 metros sobre el lecho de este afluente. Con ello, agrega, se logró mitigar el riesgo. Aunque, admite, el peligro persiste al igual que en los 25 predios asentados de manera irregular en áreas verdes y 45 colonias de la delegación, que en su conjunto alojan a 37 mil 360 personas.

Refirió que esa demarcación es una de las más vulnerables a los fenómenos meteorológicos, porque en ella se encuentran siete barrancas y 13 de las 18 presas que existen en la ciudad, cuyos alrededores han sido habitados gradualmente.

La Subdirección de Protección Civil de Magdalena Contreras informó que se formó un talud de aproximadamente tres metros en la calle Buenavista, en San Nicolás Totolapan, que afectó únicamente la vialidad en la calle Mirador, en la colonia Las Palmas.

En tanto, se mantiene monitoreo constante en 33 puntos de riesgo por desgajamientos o deslizamientos de tierra, principalmente en las laderas de las barrancas Teximaloya, Texcalatlaco, Anzaldo y La Coyotera, y en los cauces de los ríos Eslava y Magdalena. Se habilitaron albergues en la Casa Popular, con capacidad para 750 personas, y en los centros sociales Tierra Unida y Ojo de Agua, con capacidad para 200 personas cada uno.

En las delegaciones Xochimilco y Milpa Alta también se llevan a cabo monitoreos y se habilitaron sitios como albergues. En la primera demarcación las autoridades centran la atención en el nivel del río Santiago y en la presa San Lucas, ante el riesgo de desbordamientos.

En la zona oriente los principales problemas de encharcamiento y conflicto vehicular se presentaron en la calzada Ignacio Zaragoza, en sus cruces con Ermita Iztapalapa y Peñón Viejo. En Iztapalapa se vigilan las colonias Santa María Aztahuacán, Peñón del Marqués, Ejército Constitucionalista y Minerva. También se habilitaron brigadas y hay monitoreo permanente.

En la delegación Benito Juárez, las colonias Del Valle, Santa Cruz Atoyac, Narvarte y Portales, presentaron fallas en el suministro de energía eléctrica.

Angel Bolaños, Laura Gómez, Raúl Llanos, Rocío González, Josefina Quintero y Erika Duarte