Ofrece que de llegar a la Presidencia indagará los manejos del Fobaproa y el IPAB

Plantea López Obrador comisión que esclarezca el rescate bancario

Recuerda el precandidato que Fox prometió revisar ese asunto, y ''sigue el influyentismo y los tratos privilegiados"

El Presidente, paternalista, pero con los de arriba, expone

RENATO DAVALOS ENVIADO

San Francisco del Rincon, Gto., 7 de octubre. En esta localidad guanajuatense, terruño de Vicente Fox, y en Zamora, Michoacán, de donde es oriunda Marta Sahagún, el precandidato presidencial perredista Andrés Manuel López Obrador habló de la corrupción, y planteó que, de ganar en 2006, instaurará una comisión de la verdad para esclarecer las irregularidades cometidas por los hijos de la esposa del Presidente, así como los ilícitos en el manejo del Fobaproa y del IPAB.

López Obrador emprendió la travesía por el Bajío y pasó por Irapuato y Pénjamo, antes de internarse en la comunidad zamorana cuando apenas empezaba la noche. Las versiones aparecidas en algunos medios de comunicación de que en la víspera le habían lanzado un elote en la Plaza de la Paz de Guanajuato fueron desmentidas. Pero, además, ni los reporteros que le acompañaron ni el equipo de seguridad percibieron el presunto incidente.

En la rueda de prensa nocturna en Zamora, anunció por primera vez que la reducción de los salarios a la burocracia se convertirá en reforma constitucional para que concierna no sólo al Ejecutivo, sino también al Legislativo y al Judicial.

La desolación económica de San Francisco fue resumida por López Obrador con el diagnóstico de una industria del cuero hundida en una profunda crisis que hace frente a una apertura indiscriminada de productos chinos.

''Pero son ellos -el gobierno federal- los que tienen el control del contrabando. Deciden qué entra y qué sale. Eso se va a acabar. ¡Al diablo con su economía...!", tronó junto al kiosco donde se congregó un medio millar de personas.

Gatopardismo e influyentismo

El perredista llegó a Pénjamo, a pesar de una contumaz lluvia que de un manto grueso se convertía en una casi imperceptible cortina y que no dispersaron al medio millar que acudió al jardín principal. Cuando empezaba su mensaje en esa comunidad, le gritó un joven. Desplegó un cartelón que decía: "Si AMLO eres de izquierda dónde están los Tratados de San Andrés". El equipo de seguridad trató de interceptar al manifestante y empezaron los jaloneos.

El precandidato interrumpió sus palabras y gritó: ¡Déjenlo...! Tiene derecho a expresarse con libertad. ¡No lo toquen!, e invitó a Leo Rodríguez López a subir al templete. Antes de entregarle el micrófono, le leyó uno de sus 50 compromisos en los que afirma que cumplirá esos acuerdos, en un suceso que no tenía precedente en sus recorridos.

''Protesté por el desafuero. Era una canallada. Pero creo que ha habido pocos compromisos en torno al cumplimiento de los acuerdos de San Andrés. Protesto por los que dicen que Marcos es un avientaindios", dijo Leo, penjamense e integrante de la organización Jóvenes Comunistas Mexicanos.

En San Francisco, Sergio Maldonado le entregó un sombrero que López Obrador resistió a calzarse, pero que llevaba la leyenda: ''Éxito en el 2006".

Curiosamente, hoy en este pueblo se instaló una jornada de salud que ofreció gratuitamente exámenes de diabetes, mastografías y hasta cortes de cabello.

El cambio que aquí se ofreció, recordó López Obrador, fue puro gatopardismo: la misma gata pero revolcada. "Da tristeza y coraje que quiebren múltiples empresas familiares. Pero esta gente que nos mal gobierna continuó con las políticas absurdas de abrir de par en par las puertas comerciales. ¿A quién se le ocurre la libre importación de calzado para competir con el exterior cuando todos los países protegen a sus sectores productivos?"

Después relató la historia del Fobaproa, fondo que costó al país 100 mil millones de dólares de una deuda privada que se hizo pública. Rememoró cuando Fox hizo la promesa de investigar el asunto. "¿Cómo va a avanzar el país si continúa el influyentismo y los tratos privilegiados para los de arriba?", se preguntó.

Por ello, añadió, queremos saber qué pasó con el Fobaproa y el IPAB, y qué pasó con la venta de bienes de lo que quedó de aquel enorme desfalco. Se despidió entre el grito de un hombre en la valla: "Eres mi última esperanza; si no, me levanto en armas".

Los hijos predilectos de Fox

En Irapuato, López Obrador se encontró con el pleito interno perredista que hoy tiene sin directiva municipal a este partido. Frente a unas 400 personas, varias de la tercera edad, nuevamente se refirió a la corrupción y dijo que le acusan de paternalista cuando el gobierno repite programas que antes le criticó.

''Si hay paternalismo es para los de arriba, que son los hijos predilectos, porque a las mayorías las tratan de la patada''. Una aguda silbatina se repitió cuando aludió al caso de Marta Sahagún.

Ya en Pénjamo, integrantes de las redes ciudadanas y del PRD se enfrascaron en una disputa que casi llegó a los golpes de no ser por la intervención de la policía. Los integrantes de las redes, encabezados por Juan Manuel Cervantes, quienes perdieron la elección interna partidista ante José Luis Díaz en la contienda para renovar la directiva, querían tener a su cargo la organización del mitin.

Aquí está incorporado Leopoldo Almanza, ex munícipe de Celaya por el PRI que le ganó a Sahagún y que aseguró que cuando contendió formó el grupo Amigos de Polo, que después fue retomado por la señora Sahagún para lanzar Amigos de Fox.

Sí va a regresar el fomento a las actividades productivas, pero no la corrupción, dijo el tabasqueño a los campesinos que le exigieron rescate económico y social. ¡Buuu!, corearon los asistentes cuando percibieron el apellido Sahagún. "¿Ustedes saben con qué recursos vamos a financiar nuestro proyecto?'' Y antes de señalar que con la reducción burocrática, le externaron: "Con la venta de los vestidos de Marta".

En Zamora, el ex jefe de gobierno capitalino tuvo que llamar a dejar atrás la politiquería. "Les digo a los dirigentes: 'no a una política ratonera'. Los fondos públicos se van al caño de la corrupción", dijo López Obrador, pero no quiso aludir a Sahagún. "Ya sé que lo están pensando, ya no voy a hablar del asunto", indicó desde el templete a espaldas de la catedral.