Las lluvias siguen ocasionando destrucción e inundaciones en varios estados

Hay "saldo blanco", asegura Fidel Herrera

La estela de desastre que el huracán Stan dejó en Veracruz, Campeche, Tabasco y Yucatán sigue creciendo, y en el caso de la primera entidad podría ser mayor, pues hay poblaciones a las que todavía no se ha podido ingresar para cuantificar los daños por la destrucción de caminos y puentes.

Aun con los decesos de personas que han sido reportados por autoridades municipales en diferentes puntos del estado, el gobernador Fidel Herrera aseguró que hay "saldo blanco" y no hay víctimas mortales reconocidas oficialmente.

El mandatario indicó que el desfogue de la presa La Soledad, ubicada en Mazatepec, Puebla, provocó el crecimiento de la corriente de los ríos en el norte de Veracruz.

En Boca del Río se instaló el Comando Central Unificado de Veracruz, que preside el secretario de Marina, Marco Antonio Peyrot, para encabezar la atención en zonas devastadas y su reconstrucción.

Los aguaceros que han azotado Campeche han dejaron al menos 200 damnificados en los municipios de Palizada, Candelaria, Champotón, Campeche y Hopelchén, y al menos tres ríos han comenzado a desbordarse en sus partes bajas.

En Castamay, comunidad rural del municipio de Campeche, al menos 200 casas se encuentran anegadas, lo mismo que en el ejido Vicente Guerrero, del municipio de Champotón, donde elementos del Ejército y Protección Civil distribuyen despensas.

En Yucatán, alrededor de 10 mil hectáreas de cultivos, principalmente de maíz, quedaron total o parcialmente destruidas a consecuencia de las fuertes lluvias, reportaron autoridades estatales. Los municipios más afectados se localizan, sobre todo, en las regiones sur y centro-oriente.

En ese contexto, cerca de 97 comunidades de 13 municipios de Tabasco han sido afectadas con encharcamientos, reportó la dirección de Protección Civil de esa entidad. Informó además que el desbordamiento del río Usumacinta sigue dañando a comunidades aledañas, ubicadas en los municipios de Emiliano Zapata, Tenosique, Balancán y Jonuta.

En tanto, en un primer balance tras la entrada de la onda tropical número 40, la Dirección de Protección Civil de Guerrero confirmó que hubo mil 80 familias damnificadas en ocho municipios de la Costa Grande, Costa Chica y la zona centro, así como el deceso de una recién nacida en el municipio de Atoyac.

Por otra parte, a las 11:25 horas del jueves, el buque Usumacinta de la Armada de México zarpó del puerto de Acapulco con ayuda humanitaria hacia las costas de Chiapas. El buque lleva víveres y materiales de ayuda, así como mil cobertores, hamacas, miles de despensas y 3 mil litros de agua embotellada.

Mientras tanto, en Sinaloa, luego de dar el banderazo para las obras de la carretera Navolato-Altata, Pedro Cerisola, titular de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, afirmó que una vez que concluyan las lluvias -en un plazo no mayor de 48 horas- personal de esa dependencia iniciará trabajos para abrir los caminos y vías dañados.

Se desborda el río de los Remedios

Los aguaceros de la tarde-noche del jueves provocaron una fisura en uno de los diques del río de los Remedios, en la zona norte de Nezahualcóyotl, lo que provocó inundaciones hasta de 30 centímetros de alto en unas 20 viviendas de la unidad habitacional Valle de Aragón, primera sección, además de un severo caos vial tanto en avenida Central como en Periférico Oriente, pues varios autos se quedaron varados.

Por otra parte, la Secretaría de Salud de Tamaulipas amplió la alerta sanitaria a las playas de La Pesca, Soto La Marina, y Miramar, de Madero, luego que en la costera de la ciudad de Matamoros fue necesario desalojar a mil 500 personas por la marea roja.

Andrés T. Morales, Jesús Lastra, Lorenzo Chim, Luis A. Boffil, René Alberto López, Misael Habana, Sergio Ocampo, René Ramón, Javier Valdez y Martín Sánchez, corresponsales