Recibirán cursos de autoestima y cabildeo para luchar contra la discriminación en AN
Alistan mujeres panistas estrategia para obtener mayor número de candidaturas
Tienen más pudor como para andar negociando, por eso no son beneficiadas: Clara Torres
La existencia de grupos que negocian las candidaturas en el PAN, mejor conocidos como la onda grupera, se ha traducido en la discriminación de las mujeres para ocupar puestos de elección popular, porque tienen "más pudor" para alcanzar este tipo de acuerdos, afirmó Clara Torres, secretaria de Promoción Política de la Mujer de la directiva nacional blanquiazul.
Ante ello, el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) buscará que las mujeres ocupen 50 por ciento de las postulaciones a cargos de elección popular en 2006, y para ello un grupo de precandidatas recibirá este mes cursos de autoestima, cabildeo y del funcionamiento de las ondas gruperas estatales. Además la propia dirigente declaró estar dispuesta a cabildear directamente con los líderes de las entidades que tienen "fama de machos", para pedirles que alienten las postulaciones femeninas.
El CEN también buscará reformar el reglamento de elecciones, para que los candidatos sean designados no sólo en convenciones, sino también con mecanismos como las encuestas, que permitan conocer sus "niveles de aceptación en la sociedad", pero el tema está pendiente de discusión, porque ha dividido a los consejeros nacionales.
Originaria de Ciudad Juárez, Chihuahua, y con 25 años de militancia en el PAN, la nueva responsable de impulsar la participación política de la mujer en el blanquiazul explicó que actualmente el PAN es el partido que tiene más diputadas federales (28 por ciento), pero está rezagado en cuanto al número de presidentas municipales, aproximadamente 5 por ciento.
Consideró que las derrotas electorales en buena medida se deben a la existencia de grupos que no postulan a los mejores candidatos y que después se pelean entre sí provocando divisionismo y una situación de "brazos caídos" en los comicios.
Torres describió, en entrevista, cómo funciona la llamada onda grupera. Los aspirantes a puestos de elección popular ganan las convenciones internas con acuerdos amarrados de antemano entre los grupos, de los que generalmente las mujeres quedan fuera.
"Si tú le dices a una mujer que si quiere ser candidata a senadora dentro de seis años, es muy difícil que decida, ya que todo depende de su familia, sus hijos y muchas otras cosas. No se puede acordar darle apoyo a alguien para que dentro de seis años sea candidata", refirió.
-¿Desde cuando se da el fenómeno de la onda grupera?
-Tengo 25 años en el PAN y a mí me tocó la época en que se rogaba a la gente para que fuera candidata, porque teníamos cero posibilidades de ganar una elección, pero luego cuando empezamos a ganar también surgieron estos grupos. Nuestras reglas internas permitieron que se diera eso, por eso soy una convencida de que hay que cambiarlas.
-¿Qué opinan las mujeres panistas de esta situación?
-La gran mayoría desea firmemente que se haga un cambio para que los grupos no terminen imponiéndose. Entre las propuestas que hacen las mujeres, independientemente de nuestros reglamentos internos, es que se haga el grupo de este sector de la población. A ese grado hemos llegado. Si no podemos con los grupos, pues hagamos uno. La idea del comité es acabar con eso y promover la llegada de personas que tengan arraigo social.
-Pero ¿cómo evitarán que lleguen candidatos alejados de la mística del PAN?
-Son riesgos de la democracia. Un Manuel J. Clouthier o un Francisco Barrio vinieron de la sociedad civil y nos dieron extraordinarios resultados. También puedo poner otros ejemplos, que no los voy a decir públicamente, que también se nos revirtieron. Pero no es correcto cerrar el partido a un grupo muy pequeño.
-Paradójicamente quien se perfila como candidato presidencial del PAN (Felipe Calderón) es un panista de hueso colorado.
-Esta elecciones son un primer intento de abrirnos, pero fue a medias. Si hubiera sido abierto totalmente la sociedad nos estaría diciendo si quiere al panista, panista seminuevo, panista supernuevo o alguien de la sociedad civil. Lo que nos refleja en este momento es que el panismo y los adherentes están dando un perfil de candidato.
-También existe el riesgo de que lleguen políticos que saltan de un partido a otro.
-A mí no me espanta que llegue uno de esos chapulines que es un extraordinario líder y sabe sacar adelante a la sociedad. Lo que sí me espantaría es que fuera un chapulín manipulador de las cúpulas del poder de los diferentes partidos políticos y experto en vivir del erario.
-Como no se ha reformado el reglamento de elecciones, ¿qué hará el CEN para terminar con esta discriminación en contra de las mujeres?
-Abrimos una convocatoria y recibimos 500 expedientes de mujeres que pueden aspirar a puestos de elección popular. Las vamos a capacitar en autoestima, conocimientos legales y de las ondas gruperas. También estoy dispuesta a sentarme a cabildear con algunos jefes de comités estatales. A algunos ya les he dicho: tu estado tiene fama de machos y eso no te conviene ni a ti ni al partido. Tú sabes cómo hacer que ganen las elecciones internas, te voy a dar un listado de candidatas, para que me eches la mano y salgamos adelante con 50 por ciento de las candidaturas. No queremos que lo imponga el CEN.