STAN
Envía Cuba 24 ton. de víveres y medicinas para los afectados
Ampliar la imagen El Boeing 727 aterriz� el aeropuerto de Acapulco en la tarde-noche de este s�do FOTO Misael Habana Foto: Misael Habana
La Habana y Acapulco, 8 de octubre. Cuba envió hoy a México 24 toneladas de ayuda humanitaria, entre medicinas y alimentos, destinada a los damnificados por la tormenta tropical Stan, informó la embajada mexicana.
Un avión Boeing despegó esta tarde con destino al aeropuerto de Acapulco con una carga de cinco toneladas de medicinas, 15 de leche evaporada y cuatro de compota para niños.
Aunque el cargamento está destinado a los damnificados del sureste de México, la aeronave aterrizó en Acapulco por razones logísticas, precisó la misión diplomática.
La oferta de auxilio realizada el viernes fue aceptada por las autoridades mexicanas, que en una declaración de la cancillería agradecieron el "gesto" del pueblo y gobierno de Cuba.
La isla también ofreció los servicios de 200 médicos, integrantes del recién creado Grupo de Ayuda de Emergencia para Situaciones de Desastre.
El gobierno mexicano indicó que volverá a ponerse en contacto con La Habana para evaluar la oferta, "una vez que las condiciones logísticas que impiden el tránsito y la movilidad de personas estén resueltas".
El gesto cubano y la respuesta de México fueron reseñados aquí destacadamente. El diario oficial Granma publicó una nota en su portada y el noticiario del mediodía de la televisión tocó el tema en sus primeros minutos.
Llegada a Acapulco
El avión Boeing 727, rentado por el gobierno cubano a una empresa canadiense, aterrizó por la tarde-noche en el aeropuerto internacional de Acapulco con la ayuda prometida, que mañana se enviará a Chiapas en el buque El Zapoteco, de la Armada de México.
En las instalaciones del aeropuerto guerrerense esperaban la carga la consejera de la embajada de Cuba en México, Mercedes Vicente; el director de Concertación de la Dirección General de Protección Civil de la Secretaría de Gobernación, Raúl Miliani; el comandante Jorge Arturo Maldonado Araujo, de la octava Región Naval; el director de la Unidad de Protección Civil del gobierno de Guerrero, Sabás de la Rosa Camacho, y el secretario general del ayuntamiento de Acapulco, Francisco Larequi Radilla.
En el aparato, cargado de medicamentos, leche y compostas -como llaman los cubanos a los jugos de fruta-, venía Manuel Rubido Díaz, segundo jefe de Cooperación Internacional del Ministerio de Relaciones Exteriores cubano, quien se refirió a la ayuda en estos términos:
"Quiero agradecer a las autoridades mexicanas el recibimiento, realmente inesperado. Creo que Cuba, una vez más, lo único que ha hecho humildemente es ofrecer lo que ha podido, para tratar de aliviar el dolor de aquellos que en estos momentos sufren esta calamidad natural, sin pedir nada a cambio.
"Creo que la razón fundamental de nuestro viaje aquí se ha cumplido, y está allá afuera -decía, mientras señalaba las pistas donde se descargaba el avión-: son los camiones que están listos para partir a la zona afectada. Ese era el objetivo fundamental, aliviar el dolor, y que lo reciban quienes lo necesitan en este momento", expresó.
Antes, Raúl Miliani había dado la bienvenida a la representación de la isla. A nombre de los tres niveles de gobierno que participaron en la recepción, dijo: "agradecemos al gobierno cubano su valiosísima ayuda. Queremos agradecer esta misión y reconocemos que también están participando con otros países hermanos de América Latina, como es el caso de Guatemala. El pueblo mexicano agradece profundamente este apoyo".
El funcionario del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba reiteró que la carga, que será trasladada a Chiapas y distribuida por autoridades mexicanas, está compuesta por cinco toneladas de medicamentos para la rehidratación, "pensando en la experiencia que tenemos ante este tipo de situaciones en nuestro país; se han enlistado el tipo de medicamentos exactos que se necesitan para aliviar el dolor y la calamidad".
La nota chusca la pusieron el secretario general de Gobierno, Francisco Larequi Radilla, y el director de la Unidad Estatal de Protección Civil, Sabás de la Rosa, al discutir frente a los funcionarios cubanos y evadir la responsabilidad de invitar a comer a quienes traían ayuda solidaria a México.
Los argumentos de los funcionarios, frente a los avergonzados visitantes, es que no tenían dinero. Fue el subsecretario de Prevención y Protección Ciudadana, Rafael Cortés, quien salió al paso, quien luego comentó en corto: "esta gente nos viene a ayudar y estos señores (estaban) evadiendo un gesto de cortesía".
La ayuda cubana se sumará a las 95 toneladas de víveres que se enviarán desde Distrito Federal mañana en el buque El Zapoteco hacia Chiapas.