La inversión es muy baja en todos los sectores, reconocen especialistas
Pemex inició investigación tecnológica para perforar en aguas profundas
El Instituto Mexicano del Petróleo desarrolla el proyecto, informan
Ampliar la imagen Perforaci�e un pozo de Pemex en Tlalixcoyan, Veracruz FOTO Notimex Foto: Notimex
Petróleos Mexicanos (Pemex) inició la investigación tecnológica para realizar la perforación de yacimientos en aguas profundas, anunciaron el subsecretario de Planeación Energética y Desarrollo Tecnológico, Carlos Garza, y Pablo Mulás, asesor de la Rectoría de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM). Sin embargo, reconocieron que la inversión en investigación en todos los sectores, no sólo en el energético, es muy baja.
Mulás informó que la paraestatal ya le encargó al Instituto Mexicano del Petróleo que se meta de lleno a desarrollar y transferir la tecnología relacionada con la explotación de yacimientos en aguas profundas. Esta decisión está a tiempo, porque de haber invertido en ese proceso hace mucho no habría sido rentable.
A México, agregó, se le reconoce como poseedor de un recurso grande, pero la reserva de Pemex es de sólo 12 mil millones de barriles, y aún cuando no somos de los principales, sí equivalen a las de las grandes petroleras privadas.
Garza y Mulás hablaron al presentar la prospectiva tecnológica del sector energía para el siglo XXI, que incluye desarrollos científicos y tecnológicos que se realizan a nivel mundial e indicaron que el siguiente paso será hacer un informe sobre la situación de México, para saber de qué forma se pueden utilizar esos avances en nuestro país.
En el documento dado a conocer no se considera la posible asociación con firmas extranjeras y sólo se analizan los avances que se han alcanzado a escala internacional y lo que puede ocurrir en los próximos 20 años.
En cuestión energética, indicó Mulás, las empresas en México están utilizando la tecnología disponible en forma adecuada. No es un problema de que estén rezagadas en la aplicación de esos avances.
Hay problemas financieros, pero la calidad de los recursos humanos en las empresas energéticas de México son tan buenas como en otras partes del mundo, pero la inversión para innovar la tecnología es extremadamente baja, precisó. El problema es nacional porque son pocos los recursos que se le destinan.
En el documento dado a conocer por Garza se expone que la penetración de nuevas tecnologías tiende a ser relativamente lenta, debido al tamaño de las inversiones requeridas y a que las instalaciones actuales tienen vidas útiles por lo general de varias décadas.
Por lo tanto, agrega, para 2030 no se espera que la estructura del sistema energético mundial cambie de manera radical; lo más probable es que se observarán mejoras en las opciones energéticas y comerciales del presente y algunas nuevas tecnologías ocupando un porcentaje minoritario de su sector de aplicación.
La prospectiva tecnológica es útil como señalamiento de desarrollos que conviene monitorear para analizar la probabilidad de éxito de su comercialización y tomar decisiones en cuanto a la conveniencia de su incorporación al sector energético nacional, agrega.
En sus conclusiones plantea que en el caso de las tecnologías en desarrollo, aunque todavía lejos de su comercialización, en la mayoría de los casos no se ha determinado el impacto ambiental que pueden tener, y en cuanto a los recursos naturales, es claro que los hidrocarburos son el recurso convencional más abundante en cuanto a reservas probadas que tiene el país.