En cuatro años el valor del suelo se ha incrementado 50%, señala especialista
Miguel Hidalgo: crece la presión de inmobiliarias en 70 colonias populares
El nuevo plan de desarrollo urbano, oportunidad de negocio para constructoras: vecinos
Vecinos de la delegación Miguel Hidalgo señalaron que compañías constructoras se disponen a aprovechar la reforma al Programa de Desarrollo Urbano que la demarcación presentó a la Asamblea Legislativa del Distrito Federal para promover el reciclamiento de 70 de las 80 colonias populares que hay en la demarcación, e incrementar las ganancias que han obtenido con la edificación de casas de interés social.
En defensa de la reforma, Juan Felipe Ordóñez, miembro del equipo de consultores que asesora a la Dirección de Obras y Desarrollo Urbano de Miguel Hidalgo, dijo que el aspecto más importante del proyecto es ayudar a los habitantes de esas zonas a que no sean expulsados por la presión inmobiliaria.
"El chiste de la propuesta es que la delegación cuente con un área para la producción inmobiliaria en esas zonas, que le deje dinero para subsidiar obras en las colonias populares", argumentó. El objetivo es contar con recursos para mejorar los servicios de agua, drenaje, mercados, así como la infraestructura de salud, agregó el entrevistado.
Señaló que las colonias populares de las cuatro delegaciones ubicadas en el centro de la ciudad: Miguel Hidalgo, Benito Juárez, Cuauhtémoc y Venustiano Carranza, enfrentan la presión de las empresas inmobiliarias.
Precisó que en esas demarcaciones el precio del suelo se se ha incrementado 50 por ciento de 2001 a la fecha.
Entre las colonias que pueden reordenar su crecimiento se encuentran la Anáhuac, donde empresas inmobiliarias, de hecho, ya han empezado a construir viviendas de lujo y a promover la zona como la ampliación de Polanco, y la Pensil, que hace unos años se ubicaba entre las de más alta incidencia delictiva. Entre las colonias que se pueden reciclar están las ubicadas al norte de la demarcación; de hecho, todas las que tienen traza octagonal norte-sur, cuentan con manzanas y lotes regulares y sus calles tienen más de 12 metros de ancho, y están ligadas al Circuito Interior y a la avenida Marina Nacional hasta Tacuba, agregó.
Refirió que la zona norte de la demarcación se urbanizó en 1940 y ya está deteriorada la red de agua y la de drenaje, y hay construcciones con más de 70 años de antigüedad que han carecido de mantenimiento y se tendrían que renovar.
Empero, consideró que el reciclaje no es una "camisa de fuerza", es más bien una invitación a que se puedan renovar, aunque "el ciudadano que se quiere quedar como está en la casa que tiene, es totalmente libre de hacerlo".
Sobre la consecuencia de la presión que ejercen las inmobiliarias sobre los propietarios de casas en esas colonias, dijo que el plan vigente de desarrollo urbano "las empresas inmobiliarias lo ven como una oportunidad para comprar terrenos y hacer edificios de varios niveles; observando esa problemática, la reforma establece mecanismos de regulación para ampliar las zonas patrimoniales, las cuales no podrán ser recicladas".