Se extiende el fenómeno en América Latina: OEA
Crece el gasto proselitista en medios de comunicación
El gasto proselitista destinado a los medios de comunicación en las democracias latinoamericanas ha incrementado su importancia en las campañas electorales, al grado de que en la actualidad se calcula que entre 60 y 80 por ciento de los recursos totales ejercidos se destinan a ese rubro, sostuvo Steven Grinner, coordinador del Foro Interamericano sobre Partidos Políticos de la Organización de Estados Americanos (OEA), quien agregó que se ha comprobado que no siempre la aplicación de esos fondos se traduce en éxito político.
Durante la presentación del libro Regímenes de financiamiento y fiscalización en América Latina, elaborado por Carlos Navarro, miembro de la Coordinación de Asuntos Internacionales del Instituto Federal Electoral, Grinner reconoció que la inversión en propaganda política es un rubro muy difícil de regular, a pesar de que en varios países se han introducido esquemas para limitar el acceso a los medios electrónicos como forma de contener el ingreso de dinero de origen dudoso en las campañas políticas.
Por su parte, el magistrado presidente del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, Leonel Castillo, destacó la importancia del estudio comparativo de legislaciones, que permite conocer que en Argentina los partidos políticos deben invertir 20 por ciento del dinero que tienen en cursos de formación de militantes.
En este contexto, destacó que en México debe reforzarse la educación cívica, pues sin ésta, sin una ciudadanía informada, "no importan autoridades electorales de lujo, no importa la mejor organización, no importan los máximos recursos para las elecciones si los principales actores de las mismas no están en condiciones ni movidos a participar en los comicios".
Por su parte, el consejero y presidente de la Comisión de Fiscalización del IFE, Andrés Albo, subrayó la importancia que ha adquirido el tema en las democracias latinoamericanas, en las cuales existe una tendencia a la introducción de nuevos lineamientos para regular la relación partidos-dinero y para mejorar el esquema de fiscalización a cargo de las autoridades electorales.