Hoy presenta Se acabó el reve en el Cultural Roots
El reggaeton es una imposición del mercado musical: Rastrillos
Ampliar la imagen Con la m�ina bien aceitada, Rastrillos regresa a la escena con nuevo disco, en el que muestra toda su influencia musical
Rastrillos es uno de los grupos emblemáticos en la historia del reggae en México. Son creadores del llamado movimiento Razteca (que gestó también un festival que se realizó por años), pero desde hace un lustro, cuando editaron el disco Códigos del alma, sólo sabía de ellos la banda subterránea que fiel los seguía en sus tocadas.
Ahora, con nuevos integrantes (sólo quedan el baterista Chino y el bajista-vocalista, Zopi), en la tónica actual de los tiempos, congruente con las luchas sociales que se han manifestado a través de esta propuesta musical, y revolviéndose con otros ritmos como el son jarocho, la salsa, el world beat, entre otros, Rastrillos se divierte y ahora comparte su nueva producción, Se acabó el reve, que se presentará hoy a partir de las tres de la tarde en el Cultural Roots (Tacuba 81, Centro), con un concierto en el que compartirán escenario con Tribu (música prehispánica) y Balajú (son jarocho).
"Tuvimos una ruptura que fue en conjunto con el festival Razteca; esta ruptura nos pegó, pero la cuestión fue asentar el proceso interno del grupo. Fue definir a los integrantes nuevos, porque los viejos tuvieron caminos particulares que se salieron de la banda. En 2004 estábamos armados para el disco. Se ajustó la máquina y quedó bien aceitadita", dice Gerardo Pimentel, Zopi.
Resistir la chafez
Rastrillos es una banda que "siempre se ha mantenido tocando, más que de venta de discos. Es la manera de resistir, la parte subterránea, lo autogestivo. Mostramos ahora toda nuestra influencia: el son jarocho, la salsa, el funk, el jazz... todo eso dio los colores del disco. La banda ha tratado de mezclar, pero creo que lo que nos queda es la parte buena de la globalización. Tenemos esa parte que nos hace resistir al mercado del rollo comercial, a la chafez que nos meten por todos lados.
-¿Cómo es el reggaeton?
-Es la respuesta de cierto sector de banda, que bajo el influjo del mercado, le entra al juego y se vende; es una especie de oportunismo. Tiene un contenido nefasto, porque es súper misógino, sexista, pero es lo que vende y a la gente le gusta consumir. De pronto espanta, pero hay mucha gente a la que le gusta. Me platica el saxofonista que en Cuba el reggaeton está abriendo (desplazando) a los grupos tradicionales de son, dejándolos sin chamba. Esa es la imposición del mercado, la frialdad del mercado neoliberal que hace efecto en las nuevas generaciones.
La extinción de Razteca
Pero también existen cosas como las que hace Rastrillos. "Eso viene desde la educación, del enfoque de los medios, sobre todo electrónicos y la mierda que sale de allí. Y también en las escuelas, y te das cuenta de que los programas básicos de música son nulos. Entonces en una cultura musical tan rica como la de México, es increíble que no haya un programa educativo chingón. Y por otro lado, la visión de la cultura, no como un privilegio sino como una necesidad para la sociedad", asegura Zopi, quien junto con Miguel Velázquez, Chino (batería), Arturo Galván (guitarra rítmica y coros), Hernán Campodónico (guitarra líder), Enrique Noguez (teclados), Iván Serrano (trompeta), Sergio Sorcia (trombón), Alejandro Gournalusse (sax tenor), Rubén Pérez (percusión mexica) y José Luis Palacios (percusión eléctrica), conforman el grupo.
Los Rastrillos, como otros grupos, ya tenían un nicho en México, que se mostraba con su festival Razteca. "Fue necesario que se extinguiera para que sucediera lo que pasa ahora. El movimiento nos rebasó. La falta de experiencia, de la conciencia de la magnitud de lo que se estaba haciendo, nos faltó consolidar más las bases. Nos estancamos, pero fue un aprendizaje. Ahora estamos en el proceso de resistencia aislada. Ahora se gesta lo que son los Sound System al estilo jamaiquino, retomar las pistas y sobre eso improvisar".
Se acabó el reve y es tiempo de pagar lo que uno debe, dice Zopi.
Rastrillos en Cultural Roots. Tacuba 81 a media cuadra del Zócalo, a partir de las tres de la tarde. Boleto 35 pesos y 95 con disco incluido.