Podría ser una alternativa a los clones terapéuticos
Obtienen celulas madres sin destruir embriones
Nueva York, 17 de octubre. Dos equipos científicos estadunidenses lograron, en un experimento con animales, obtener células madres sin destruir los embriones clonados, según informó en su edición en Internet la revista especializada Nature.
El procedimiento pretende ser una alternativa a los clones terapéuticos, con los cuales los médicos quieren producir tejidos de remplazo hechos a medida para pacientes gravemente enfermos. En países como Alemania, Italia, Estados Unidos, entre otros, la clonación terapéutica está limitada o prohibida por razones éticas.
El nuevo procedimiento hasta ahora sólo ha sido probado en ratones. Los creadores son Rudolf Jaenisch y Alexander Meissner, del Instituto Tecnológico de Massachussetts (MIT), en Cambridge, así como Bob Lanza y colegas de la empresa de biotecnología Advanced Cell Technology (ACT), de la vecina localidad de Worcester.
Jaenisch y Meissner usaron un truco genético, que impidió a sus embriones de ratón seguir desarrollándose como un feto en el útero. Los investigadores desactivaron momentáneamente el gen Cdx2. Este gen ayuda en la formación de células que rodean al embrión como una piel y le posibilitan adherirse a la pared del útero.
De esta forma los científicos crearon embriones inviables, los cuales podrían ser usados para fines médicos sin reparos éticos, indicó el experto en células madres Irving Weissman, de la Universidad de Stanford (California).
Los embriones de ratones clonados por Jaenisch y Meissner eran "anómalos", sin el gen Cdx2, pero aun así brindaron células madres embrionarias usables. Estas pudieron ser multiplicadas en cultivos y transformadas en células de distinto tipo: células nerviosas, folículos de cabello, células de músculos o intestinales.
El equipo del Instituto Whitehead para Investigaciones Médicas del MIT incluso logró reactivar en cultivos el gen Cdx2 de las células madres embrionarias, para poder utilizarlas terapéuticamente.
Bob Lanza y sus colegas de ACT sevaleron de un truco que desde hace algún tiempo se usa en las clínicas de fertilidad asistida. Este permite examinar los embriones en busca de posibles defectos genéticos antes de implantarlos en el útero.
Lanza extrajo una célula al embrión en la primera fase, que luego da origen a otras ocho. En vez de emplear la célula, llamada blastómero, para el diagnóstico genético como se hace usualmente, Lanza la clonó. Luego, tras un procedimiento adicional, obtuvo finalmente cinco líneas de células madres.
Lanza cree que gracias a este procedimiento es posible crear un depósito utilizable terapéuticamente para recién nacidos.