"Voté sí, pero la voluntad popular es soberana", dijo el presidente tras sufragar
Otro revés político a Lula: rechazan los brasileños prohibir la venta de armas
La mercadotecnia capitalizó la insatisfacción por la inseguridad para el triunfo del no: ONG
Ampliar la imagen Luiz Inacio Lula da Silva tras emitir su voto por la prohibici�e la venta de armas. A la derecha una integrante de la ONG antiviolencia Viva R� luego de enterarse del resultado del plebiscito FOTOS REUTERS y AP Foto: S REUTERS y AP
Río de Janeiro, 23 de octubre. El presidente Luiz Inacio Lula da Silva sufrió hoy un nuevo revés político, luego de que la mayoría de los ciudadanos brasileños rechazó la propuesta gubernamental de prohibir la venta de armas de fuego y municiones en este país de 185 millones de habitantes, donde seis de cada 10 homicidios son cometidos con pistolas, rifles o ametralladoras, según estadísticas oficiales.
El Tribunal Superior Electoral informó que casi 61 millones de votantes -64 por ciento de 96 millones de personas que acudieron a las urnas- respaldaron el sí a la venta de armamento a particulares, y por el no se pronunciaron 35 millones, que representan 35 por ciento de los electores registrados.
Unos 122 millones de votantes fueron convocados a las urnas para responder a una pregunta: "¿El comercio de armas de fuego y municiones debe ser prohibido en Brasil?"
Unos 25 millones de personas, 21 por ciento de los ciudadanos, se abstuvieron de responder el interrogante.
En las dos principales ciudades del país se impuso el no a la prohibición. En Sao Paulo venció con 60 por ciento y en Río de Janeiro -donde los problemas de violencia son tema constante de la prensa y los noticiarios de radio y televisión- con 62 por ciento. Los partidarios al mercado abierto arrasaron en los 27 estados del país.
El gobierno del petista Luiz Inacio Lula da Silva, personalidades públicas como el músico Chico Buarque y organizaciones civiles y religiosas llamaron a votar por el sí como forma de ayudar a reducir la tasa de homicidios con armas de fuego.
"Pienso que una persona común con un arma en la mano no da seguridad. Por eso voté sí. Pero la voluntad del pueblo es soberana", dijo Lula tras depositar su boleta en Sao Paulo.
Los partidarios del no, entre los que había legisladores de oposición, asociaciones de víctimas de la delincuencia, fabricantes y vendedores de armas, apelaron al "derecho de legítima defensa" y argumentaron que los servicios de seguridad del Estado no tienen la capacidad para proteger a la población.
La versión en Internet del diario Folha de Sao Paulo citó a dirigentes de organizaciones cívicas, quienes señalaron que "el marketing político" fue una de las principales "armas" del no, pues lograron capitalizar "la insatisfacción" de la gente por la inseguridad pública, dijo Rubem Cesar Fernandes, secretario ejecutivo de la organización no gubernamental Viva Río.
A pesar del triunfo del sí, el ministro de Justicia, Marcio Thomas Bastos, dijo que el gobierno continuará un "riguroso" control de las armas de fuego en posesión de civiles.
Un estudio de la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura realizado en 57 países, halló que entre 1979 y 2004 hubo en Brasil 550 mil asesinatos cometidos con armas de fuego. La tasa de homicidios con esos medios es de 21 por cada 100 mil habitantes, sólo superada por Venezuela.
La jornada transcurrió sin incidentes, pero unas 2 mil urnas electrónicas -de 323 mil 368 instaladas en el país- tuvieron fallas en su funcionamiento y debieron ser remplazadas.
Este referendo es la tercera consulta pública en la historia de Brasil. En 1963 hubo un plebiscito para decidir el cambio del sistema parlamentario al presidencialista y en 1993, otro para ratificar la forma de Estado republicana, por encima de la monarquía, abolida en 1898.