Imparables, saqueos a comercios y tiendas departamentales
En Cancún están dañadas 90% de construcciones
La ciudad lleva sin luz 72 horas; filas interminables en tiendas del centro para adquirir velas y víveres
Ampliar la imagen El presidente Vicente Fox recorre zonas afectadas por Wilma en Canc�uintana Roo. Lo acompa�su esposa Marta Sahag�l gobernador F�x Gonz�z y algunos secretarios de Estado FOTO Notimex Foto: Notimex
Ampliar la imagen Soldados detienen a un hombre, quien fue sorprendido junto con otras personas cuando saqueaba un comercio en el centro de Canc�TO Ap Foto: Ap
Cancún, QR, 23 de octubre. Los daños en el corazón económico de Cancún, la zona hotelera, alcanzan a 90 por ciento de las construcciones: restaurantes, discotecas, departamentos en condominio, hoteles gran turismo y hermosas casas, las cuales están severamente dañadas por el paso del huracán Wilma. Fachadas, ventanas, puertas, cristales, inclusive los recibidores de aluminio, cristal y estructuras de bahía no existen, están en el piso. Se calcula que se requerirán al menos cuatro meses para restaurar las actividades de ese sector.
No muy lejos de ahí, continuó el saqueo a tiendas departamentales y comercios en el centro de la ciudad: cientos de personas se abalanzaron sobre ellos. Algunos usaban los colchones como lanchas, en los que transportaban lo saqueado: salas completas, recámaras estufas y refrigeradores. Otros continuaban saqueando víveres de los comercios: botellas de agua, galletas, fritangas y pan blanco.
Los saqueadores se sentían seguros de que no iban a ser detenidos, debido a que la policía pasaba cerca de ellos y nada hacía. La postura de los uniformados era: "le decimos a las personas que está bien, que si tienen hambre se lleven comida, pero no pueden llevarse ropa, artículos electrónicos mucho menos muebles".
La subdirectora de Policía y Tránsito de Cancún, Anita Boldo, aseguró a este diario: "los daños en la zona hotelera son masivos, pero nada es estructural, es aparatoso pero son daños cosméticos. Nos preocupa que en la zona hotelera y en la zona centro continúa el pillaje, el saqueo, tenemos que cuidar las propiedades y los comercios, pero la policía está cansada, tiene tres días sin descanso y ha comido poco".
Por radio se escuchaba: "necesitamos ayuda, manden al Ejército al Chedraui que está en la López Portillo, lo quieren saquear y no podemos contener a la gente". La comandante sólo se limito a mover la cabeza. "¿Qué podemos hacer?, necesitamos refuerzos, no nos damos abasto, nos preocupa que esta situación se generalice", refirió.
El alcalde de Benito Juárez, Francisco Alor, negó, sin embargo, que la situación esté fuera de control: "la autoridad hace lo que debe, pero también hay mucha hambre y necesidad del pueblo", justificó.
Este día, la zona hotelera se abrió por primera vez, luego del paso de Wilma. Arribaron decenas de vehículos, y a la vista eran aparatosos los daños en este sitio. En las plazas comerciales las puertas principales volaron, algunos marcos de ventanas colgaban, otras yacían en el piso. Una y otra vez la misma escena se repite a lo largo de la costera. Los daños en los restaurantes ubicados a la orilla de la laguna o del mar, eran mayores: sin puertas ni ventanas, invitaban al pillaje, que se dio aquí también. Policías judiciales detuvieron a unos jóvenes que saquearon la tienda Martí y llevaban maletas con ropa deportiva. Decenas de palmeras y árboles fueron arrancados por el viento y estaban tirados en las avenidas. Igual postes y anuncios espectaculares.
Tirso Ramírez, dueño de un restaurante en la zona hotelera, dijo en entrevista: "ninguno nos preparamos para un evento de esta magnitud. Nos confiamos luego de ver las escenas del huracán Emily; creímos que no iba a impactar con tanta fuerza. La gente de aquí tiene espíritu de recuperación, ahora habrá que reconstruir esto, esperamos que en tres o cuatro meses salgamos adelante.
Desde la entrada a la zona hotelera, hoteles como Hyatt, Bland, Sunset, Presidente Intercontinental, Beach Paradise, Aristos, Sheraton, Royal Solaris, y plazas comerciales como la Fiesta, Solaris, Caracol, exhiben los estragos que provocó del paso de Wilma.
En el centro de la ciudad, hoy también, después de 72 horas, cientos de personas salieron a la calle. En las tiendas Oxxo las filas eran interminables: los cancunenses buscaban víveres y velas, porque ya son 72 horas que la ciudad no tiene luz.
Hoy desde las 8 de la mañana, se empezó a preparar el arribo del presidente Vicente Fox a Cancún. Brigadas de trabajadores del municipio, de La Marina, del Ejército, iniciaron los trabajos de limpieza. "Los árboles que se encontraban atravesados en las principales avenidas eran cortados con hachas o sierras". Se le tiene que abrir paso a la comitiva presidencial, aseguraban los policías que cuidaban el acceso a la carretera que lleva a la zona hotelera.
Lo anterior provocó que varios vecinos se molestaran y reclamaran: "¿Por qué primero se le prepara el terreno al Presidente? Nosotros somos los que vivimos aquí. ¿Por qué no nos dejan pasar a nuestras casas?, aquí vivimos, ya tuvimos suficiente con el huracán para que todavía ahora nos prohíban pasar".
De igual forma cientos de personas llegaron al palacio municipal donde, en un tráiler se repartía la primera ayuda: botellas de agua. Dos litros por persona, y las personas cuestionaban "¿y la comida? Necesitamos comida".
En hoteles en la zona centro los huéspedes también se quejaron de que se les acabaron las provisiones.
Demandaron alimentos porque hay niños que ya tienen 24 horas sin comer, segun dijeron.