Firma Bush declaratoria de catástrofe natural; 20 condados, en estado de emergencia
Wilma causa cuatro muertes en Florida; sin electricidad, 3 millones de personas
Miami, 24 de octubre. El huracán Wilma golpeó hoy el sur de la península de Florida con ráfagas de agua y vientos sostenidos de 180 kilómetros por hora, que dejaron una ruta de destrucción e inundaciones desde el puerto de Naples, en el Golfo de México, y el turístico Cayo Hueso, hasta las ciudades de Miami, Miami Beach, Fort Lauderdale y West Palm Beach, en la costa del Atlántico.
El octavo huracán que azota Florida en 15 meses causó la muerte de cuatro personas -según información de medios de comunicación en Internet-, hundió decenas de pequeñas embarcaciones recreativas y de pesca, volcó aeronaves en tierra, destruyó fachadas de edificios altos y dejó sin electricidad a por lo menos 3 millones de personas en el sur del estado.
"Firmé una declaración de catástrofe natural hoy" para Florida, informó el presidente George W. Bush, al dar a conocer que 20 condados del estado fueron declarados en "estado de emergencia" y recibirán fondos especiales para la reconstrucción.
Con categoría dos en la escala Saffir Simpson -de cinco niveles-, Wilma tocó tierra a las seis y media de la mañana y cuatro horas más tarde, cuando llegó al océano Atlántico con dirección al noreste, recuperó fuerza y el Centro Nacional de Huracanes lo clasificó en el nivel tres.
La masa circular de nubes, agua y viento que avanzó sobre la península a una velocidad de aproximadamente 40 kilómetros por hora llegó al Atlántico con un diámetro de 645 kilómetros.
"El daño que Wilma ocasionará en el sistema de distribución eléctrica debe ser más severo y extenso que el experimentado durante los huracanes Frances y Jeanne el año pasado", indicó en un comunicado la compañía Florida Power Light, que suspendió el funcionamiento de tres reactores nucleares ubicados en la región. La reanudación del servicio de electricidad tardará en algunas zonas hasta tres semanas, según funcionarios de la empresa.
Los residentes del sur de la Florida esperaban el domingo que la tormenta pegara con menos fuerza y sólo 36 mil personas acudieron a los refugios públicos estatales, según la oficina regional de la Agencia de Control de Emergencias (FEMA, por sus siglas en inglés).
En los cayos de la punta sur de la península, que sirven de límite natural entre el estrecho de Florida y el Golfo de México, sólo una décima parte de los 80 mil habitantes atendieron la orden de desalojo dada el fin de semana por el gobierno estatal, encabezado por Jeb Bush, hermano del presidente.
El tamaño del meteoro y la fuerza de los vientos provocaron una marejada que afectó principalmente a Naples y los cayos Hueso y Largo.
"Hay una inundación masiva de punta a punta, de uno a 1.5 metros de profundidad", dijo el alcalde de Cayo Hueso, Morgan McPherson.
Las peores marejadas, sin embargo, ocurrieron en un área no habitada al sur de Naples. En esta localidad, decenas de edificaciones y viviendas recibieron directamente el paso del huracán.
Sobre tierra firme los vientos fueron capaces de volcar aeronaves. Según un despacho de la versión en Internet del diario The Miami Herald, en Fort Lauderdale, un avión que forma parte de un monumento a los soldados estadunidenses caídos en la guerra de Corea, de los años cincuenta, fue elevado por el viento y azotado en el lodo con la punta del fuselaje por delante.
La radio local en el condado de Broward (al norte de Miami) dio cuenta de daños parciales o totales a más de 200 botes recreativos que estaban amarrados en una marina.
También hubo reportes sobre fachadas de edificios destruidas en Fort Lauderdale y de casas móviles volcadas en la localidad de Pompano Beach, así como de techos desprendidos en varias localidades que están sobre la ruta que siguió Wilma del suroeste al noreste.
En Miami, donde seis personas fueron arrestadas por saquear comercios destruidos, el alcalde Carlos Alvarez implantó el toque de queda entre las 20 horas del domingo y las seis de este lunes. En el condado de Broward, la norma rigió entre las siete de la noche del domingo y las siete de la mañana de hoy.
En la principal ciudad del estado el servicio del tren elevado local fue suspendido por tres días, a causa de los daños provocados por el huracán.
Los cuatro decesos durante la tormenta ocurrieron en las localidades de Coral Springs, Loxahatchee, Immokalle y en el condado de Collier.