Exige la CNC plan emergente de apoyo a agricultores

La Confederación Nacional Campesina (CNC) exigió al presidente Vicente Fox Quesada establecer un plan de emergencia urgente y especial en apoyo a los agricultores y ganaderos del país, debido a los fenómenos climatológicos que han dejado pérdidas aún no cuantificadas. Las entidades norteñas "padecen una lenta agonía" por el estiaje desde hace 12 años; las del sureste sufren por los embates de los huracanes.

Por los fenómenos climatológicos se estima que hay déficit de 10 millones de cabezas y los ganaderos arrastran una cartera vencida de 4 mil millones de pesos, asentó Heladio Ramírez López, presidente de la CNC. Agregó que en este año se estima que medio millón de campesinos del norte sufrirán las consecuencias de la fuerte sequía.

Todos los productores del agro se sienten los "brutales rigores" del tiempo, los sureños de Quintana Roo, Yucatán, Campeche, Veracruz, Oaxaca y Chiapas sufren a causa de las intensas lluvias; los de Chihuahua, Zacatecas, Durango y Aguascalientes, entre otras entidades norteñas, padecen debido a casi 12 años de ausencia de agua.

"Esta no es una visión catastrofista, sino un análisis objetivo. La actividad agropecuaria enfrenta no sólo a la naturaleza, también a la injusta apertura comercial, la incapacidad burocrática del gobierno y el alejamiento del Estado de la realidad del campo mexicano", asentó el dirigente, en la toma de protesta de la Unión Ganadera de Chihuahua División del Norte.

Sin embargo, el dirigente cenecista dijo que el mayor enemigo de los campesinos del país es el capítulo agropecuario del Tratado de Libre Comercio de América del Norte que ha puesto en crisis a más de millón y medio de unidades de producción y ranchos ganaderos.

La actividad ganadera ocupa el 53.7 por ciento, más de la mitad, de los 200 millones de hectáreas de tierras laborables existentes en la República, y contribuye con cerca de 40 por ciento del PIB del sector.

El consumo de carne, sostuvo, creció en 40 años 458 por ciento, pero la mayor parte de la demanda se cubre con importaciones. La avicultura, no obstante su crecimiento, ha expulsado de esta actividad a miles de pequeños y medianos productores.

"La porcicultura mexicana lamentablemente enfrenta el mismo destino, ante la sustitución de los productos de cerdo por despojos, como las pastas de ave que en realidad son desechos de la industria avícola de los Estados Unidos que ha encontrado en nuestro país un terreno fértil para colocar sus excedentes", expresó.