Encendió Deep Purple el Auditorio
La filosofía púrpura iluminó el Auditorio Nacional el pasado lunes, en el concierto del grupo inglés Deep Purple (fundado en 1968), que alcanzó su clímax cuando interpretó Smoke on the water, que narra un hecho real: el incendio del casino de Montreux a la orilla del lago Ginebra, en 1971. Los coros se repitieron en el foro de Reforma, sobre todo de viejos seguidores de la banda, considerada una de las más ruidosas.
Ritchie Blackmore, alejado de la banda por padecer hepatitis y considerado uno de los guitarristas más imaginativos del rock pesado, tiene un buen sustituto con Steve Morse, ex guitarrista de Dixie Dregs y Kansas.
La voz de Ian Gillan puso a cantar a miles con Black night. Deep Purple actuó por primera vez en México el 24 de noviembre de 1994 y va en su sexta formación, con Ian Gillan, Roger Glover, Jon Lord, Steve Morse e Ian Paice. Ya los años se marcan en la apariencia, pero lucen sanos, producto del deporte, el yoga y el buen comer.
Sus canciones refieren hechos reales y toman postura. En un momento emocionante, Jon Lord tocó el piano y pasó de piezas clásicas al rock; provocó algarabía cuando tocó un fragmento de El jarabe tapatío. Siguió con el tema central de Star wars.
Otro clásico: Space truckin, de su disco Machine head (incluye Smoke on the water), fechado en 1972.
A las 22:35 se rompió la espera. Comenzaron los acordes de Smoke on the water. Miles (los cuales no llenaron el Auditorio) iban por esa rola.
Se despidieron, pero los miles de anhelantes de más ruido comenzaron a gritar para exigir una más, ¡otra, otra! Ya se sabía que la estaban haciendo cardiaca. Regresaron para hacerla chillar y rechinar.
Al salir del Auditorio Nacional, algunos jóvenes seguían cantando Smoke on the water.
Arturo Cruz Bárcena