Fueron afectados por huracanes en varios estados
Condonar contribuciones, demanda la Alampyme
Autorizar su cobertura en parcialidades, otra solución
El presidente de la Asociación Latinoamericana de Micro, Pequeños y Medianos Empresarios (Alampyme), Pedro Salcedo, propuso al gobierno federal condonar total o parcialmente el pago de contribuciones o autorizar su cobertura en parcialidades a los pequeños empresarios afectados por los huracanes.
Dijo que la propuesta es viable, porque ya se aplicó para este propósito durante el gobierno del presidente Ernesto Zedillo. Debe beneficiar a los empresarios en Chiapas, Oaxaca, Quintana Roo e Hidalgo, que no tienen aseguradas sus instalaciones ni acceso al crédito de la banca.
Para este fin debe aplicarse el artículo 39 del Código Fiscal de la Federación, que permite al Ejecutivo federal condonar total o parcialmente el pago de contribuciones o autorizar su pago a plazos, en caso de que sean afectados por fenómenos meteorológicos. Las consecuencias de estos desastres, precisó Salcedo, provocaron el deterioro inmediato de las condiciones de vida de los habitantes de esas entidades; además, el remplazo de sus enseres domésticos en ocasiones nunca se consigue y quienes resultan con mayores problemas son las familias de menores recursos y los micro, pequeños y medianos empresarios.
En conferencia de prensa, aseguró que los grandes empresarios hoteleros cuentan con seguros contra esas calamidades y las aseguradoras se aprestan a brindar su oportuno apoyo; los bancos afinan un programa de apoyo financiero, como amnistía de pagos y créditos con tasas preferenciales. Además, la Secretaría de Hacienda gestiona créditos ante el Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo para restablecer la actividad económica en la devastada infraestructura turística del Caribe.
Sin embargo, agregó, los sectores más afectados, sin seguros ni acceso a la banca, tendrán que reiniciar sus operaciones desde cero, en un escenario difícil, donde los costos de reconstrucción incluirán el efecto de la desaceleración de las actividades normales, el desabasto de bienes y servicios, así como un impacto negativo en el crecimiento de las zonas afectadas.