No frenaron el cruce
Fracasa operativo de cazamigrantes, aseguran ONG
Ciudad Juárez, chih., 29 de octubre. Organizaciones no gubernamentales (ONG) de Ciudad Juárez, Chihuahua, y El Paso, Texas, afirman que el grupo racista Minuteman Project ha fracasado porque no ha logrado inhibir en esta región el cruce de indocumentados.
Manuel Robles, titular de la coordinadora regional de ONG de Ciudad Juárez, aseguró que aparentemente su presencia fue más para espantar a los indocumentados que para atraparlos, lo que, consideró, se trata de una buena noticia, ya que los cazamigrantes forman parte de organizaciones racistas.
La única acción negativa que realizó el grupo racista fue la que denunció la Asociación de Libertades Civiles Unidas, que vigila a los minutemen en Nuevo México. Claudia Guevara, su vocera, dijo que la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos paró la semana pasada a un minutemen que llevaba en su vehículo a tres migrantes.
Esta persona, originaria de Colorado, "patrullaba" por el condado de Hidalgo, Nuevo México, cuando se encontró a tres migrantes que aparentemente le pidieron agua y comida, por lo que los llevó en su coche hacia el poblado de Hachita, donde tiene su base Minuteman Project.
Con esto, dijo, el minutemen violó las leyes que prohíben a los estadunidenses tener contacto verbal, hacer gestos o tener comunicación de cualquier tipo con migrantes que se encuentran en el desierto.
Aunque fue entrenado para observar y reportar a la Patrulla Fronteriza incidencias relacionadas con migrantes, no lo hizo así.
Estadunidenses, la mayoría de polleros
La tarde del viernes, en una estación de radio de El Paso, un hombre que se identificó como Shannon McGauley y dijo ser vocero de Minuteman Project con base en Tornillo, Texas, dijo que los cazamigrantes decidieron ampliar hasta mayo de 2006 la vigilancia en la frontera, ya que muchos indocumentados visitan sus países de origen y luego intentan regresar.
Se dijo asombrado porque en su estancia en la frontera de Nuevo México y Texas con Chihuahua se han dado cuenta de que una parte mayoritaria de los traficantes de indocumentados son estadunidenses.