Insistirá en liberar recursos para apoyar a damnificados, advierte en el Soconusco

No utilizaré el tope de campaña que aprobó el IFE, afirma López Obrador

Pide castigar a quienes han lucrado con la ayuda destinada a los afectados por las lluvias

RENATO DAVALOS ENVIADO

Tapachula, Chis., 1º de diciembre. La última gira del año por los estados del país del precandidato presidencial perredista, Andrés Manuel López Obrador, comenzó en esta región del Soconusco, devastada por las torrenciales lluvias hace un mes, en la que estableció que insistirá en que se reduzcan los gastos de campaña para liberar recursos y destinarlos a los damnificados. "No utilizaré el tope de campaña aprobado por el IFE, que me parece una exageración", dijo.

En la cabecera de esta centenaria zona cafetalera que mira el Pacífico con el rostro desdibujado por los huracanes, López Obrador se refirió a su encuentro de hace dos días con empresarios estadunidenses agrupados en la Cámara Americana de Comercio: "No voy a dorarle la píldora a nadie. Vale más que se sepa que el petróleo no es del gobierno, sino de la patria, y ésta no se vende".

El 4 de noviembre pasado, un vendaval derrumbó 30 mil viviendas, en 41 municipios, habitadas por 300 mil personas. Se perdieron 3 mil kilómetros de carreteras y la atención a los damnificados sigue en "fase de emergencia".

Aún permanecen en albergues 10 mil personas, y de los 8 mil 500 millones de pesos que prometió el presidente Vicente Fox, la gente aún reclama la ayuda. El Congreso aprobó poco más de 900 millones para la reconstrucción chiapaneca.

Tras de un breve encuentro en el aeropuerto con José Zamarripa, uno de los coordinadores de las redes ciudadanas, López Obrador viajó al sureste. Hora y media después, en entrevista aquí, externó que llegaba a la zona afectada para "ayudar en lo que podamos. Todavía no somos gobierno, pero venimos a hacer un compromiso para cuando lo seamos".

El ex jefe de Gobierno capitalino pidió castigar a los responsables que han lucrado con la ayuda a los damnificados, y exigió que continúe la indagatoria respectiva.

"Es una exageración, es mucho dinero", respondió cuando le preguntaron acerca de los recursos aprobados por el Instituto Federal Electoral (IFE) para gastos de campaña. "No vamos a llegar a gastar ese tope", aclaró. "Sólo se utilizará lo fundamental, porque es un insulto el gasto aprobado para el próximo año en un país sumido en la pobreza."

A su llegada al aeropuerto lo recibieron el diputado Emilio Zebadúa y el senador Rutilio Escandón, dos de los aspirantes a la gubernatura de Chiapas, que se renovará en agosto de 2006, un mes después de los comicios federales. El Partido de la Revolución Democrática (PRD) decidió que sea hasta enero cuando se elija candidato, probablemente mediante una encuesta.

Frente a unas mil 500 personas, López Obrador expuso que estará atento a ayudar, en la medida de lo posible, para que los afectados por las lluvias encuentren apoyo y comprensión. Desde las inundaciones, agregó, planteamos que el gasto de campaña era excesivo y que había que bajar su costo para canalizar los recursos a los damnificados.

Aunque la propuesta no prosperó, pese a que el IFE gastará en 2006 más de 14 mil millones de pesos, "seguiremos insistiendo en que se obtengan recursos para los afectados en esta zona". Recordó que el presidente perredista, Leonel Cota Montaño, recién entregó recursos a los damnificados que el PRD comprometió de sus prerrogativas del próximo año.

Después, bajo el sol insular de las dos de la tarde, López Obrador se refirió a la aspiración histórica de muchos chiapanecos para que el Soconusco se convierta en un estado más. "Es algo que sólo ellos tienen que decidir, pero el compromiso es sacar a esta región del olvido y la marginación", manifestó.

"Alto al oportunismo político de Rutilio y Zebadúa", decía un cartelón que varias personas alzaron a los pies de López Obrador, quien alcanzó a leerlo desde el templete. El precandidato perredista compartió vecindad con la estatua del prócer tapachulteco Fray Matías de Córdova. "Tenemos que acabar con la corrupción que explica la pobreza del país", apuntó.

No va a seguir lo mismo y vamos a mandar "muy lejos" a los políticos ladrones, garantizó. Terminaremos con partidas como aquella que existe para vestimenta y protocolo.

Lorenza Díaz, integrante de las redes cuidadanas, le dijo que en otros tiempos muchos los defraudaron. No lo repita, pidió. López Obrador respondió: "nosotros somos diferentes porque tenemos principios. De mí pueden decir que me parezco a no sé quién o que me como las eses o las aumento, pero nunca me podrán acusar ni de incongruente ni de ratero...".

El PT se suma a la precampaña

Por primera vez en una gira del tabasqueño aparecieron banderolas del Partido del Trabajo (PT), y el aspirante presidencial hizo alusión al pacto recién concretado con este instituto político y con Convergencia. Necesitamos esas alianzas, pero también a la gente sin partido, resumió.

Este fue un recorrido que hizo un alto en Huixtla, y después pasó por una carretera costera acompañante de la Sierra Madre de Chiapas con el rostro cortado y su olvido centenario. Tramos rotos por la naturaleza, cuyas aguas retomaron sus cauces. Un paisaje que recordó las lluvias de 1998 que siguen vivas en la propia Huixtla, Acapetahua, Escuintla, Mapastepec y Pijijiapan.

En Huixtla, López Obrador se detuvo en los puentes quebrados y en la estela de enormes piedras que arrastró la corriente a su paso. Ante unas mil 500 personas reunidas en la plaza principal, planteó que habrá que prepararse para enfrentar la próxima campaña en su contra.

La caravana lopezobradorista fue acompañada por camiones de redilas en los que se trasladó la gente para ir a la iglesia vieja de Tonalá y los esteros del Paredón. Ahí, el perredista insistió en que no es congruente que en 2006 se gaste en el proceso electoral tanto dinero, y cuestionó que aún no se haya aceptado destinar 10 por ciento de los 14 mil millones a los damnificados por las lluvias.

Otros candidatos, resumió ante el millar de personas que lo esperaron casi una hora, se la pasan en aviones y helicópteros privados sin conocer la realidad del país y sin contacto con la gente. Mañana, el día culminará en territorio zapatista.