Se negaron a debatir sobre una reforma fiscal
Revientan priístas la última sesión en San Lázaro
El PRD propuso medidas para evitar la evasión
Acusados de preservar la impunidad, los diputados del PRI reventaron anoche la última sesión ordinaria de la Cámara de Diputados al abandonar el pleno cuando se dirimía en tribuna una serie de reformas al Código Fiscal de la Federación, a las leyes del impuesto sobre la renta (ISR), del impuesto al valor agregado (IVA) y a los impuestos especiales sobre producción y servicios (IEPS).
La maniobra de los priístas significó el punto final de una zaga de acontecimientos en los que ese partido y la fracción parlamentaria del PAN resolvieron iniciativas de ley y tomaron decisiones legislativas impugnadas por PRD, PT y Convergencia. La fuerza del PRIAN se impuso en varias ocasiones, como en la aprobación del Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2006; en la abortada Ley Federal Agraria y la de Presupuesto y Cuenta Pública, entre otras. Todavía anoche, los panistas, por conducto de Gustavo Enrique Madero, quien preside la Comisión de Hacienda, intentaban convencer a los priístas de impulsar la reforma para dar autonomía al Servicio de Administración Tributaria (SAT) y a la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).
El diputado Madero, al ser cuestionado durante un receso, sostuvo que ya había entregado al PRI el dictamen de reforma al SAT y a la CNBV. "Aquí está, mire, esto fue lo que les mandé a los priístas, y esperamos que nos firmen de respaldo".
La sesión de ayer en San Lázaro fue singular. Por la tarde, el presidente de la mesa directiva, Heliodoro Díaz Escárraga, decretó un receso para que los grupos parlamentarios llegaran a un acuerdo sobre las reformas al SAT. Dos horas después reinició la sesión, y la diputada Diana Bernal, del PRD, presentó una propuesta de reforma a diversos artículos del Código Fiscal de la Federación.
Propuso medidas encaminadas a evitar la evasión fiscal, dada la creciente cultura de no pago de impuestos en el país. Entre estas medidas resaltan la de impulsar la expedición de comprobantes fiscales, y la posibilidad de inscribir en el Registro Federal de Contribuyentes a amas de casa o estudiantes, por medio de un RFC light, para contar con un prepadrón eficiente para fiscalizar y agilizar los trámites.
La reforma en la que el PRI manifestó su incomodidad se dio en el apartado donde se consideran como ingresos los depósitos bancarios superiores a 50 mil pesos, y los gastos en bienes muebles e inmuebles iguales o superiores a esa cantidad. Ahí se provocó la ruptura, porque los priístas sostuvieron que tal situación no era más que terrorismo fiscal.
El priísta Juan Carlos Pérez Góngora replicó con el siguiente ejemplo: "si ustedes, diputados, le depositan a su esposa arriba de 50 mil pesos, la Secretaría de Hacienda va a presumir que es una omisión de ingresos para efectos del ISR, sin importar que sea contribuyente o que esté registrada".
Desde su curul, el coordinador parlamentario del PRD, Pablo Gómez, lo cuestionó, "¿por qué, diputado, dice usted una verdad a la mitad? La persona que reciba el dinero debe ser necesariamente no causante, no tener registro hacendario, porque si se trata de una persona que sí lo es, puede recibir 50 millones -espero que usted nunca haga ese regalo-, sin necesidad de dar parte, de ser considerado para poder abrir un procedimiento de carácter fiscal".
Mientras el priísta daba ejemplos de carretadas de millones de pesos para confrontar la propuesta de Diana Bernal, ésta subió a tribuna para defenderse: "es falso que de manera automática pueda ser un depósito (de 50 mil pesos) que la Secretaría de Hacienda presuma que es ingreso. A lo único que esto da origen es a la iniciación de un procedimiento que se denomina determinación presuntiva de ingreso".
En respuesta, el priísta Carlos Jiménez Macías replicó: "se lo digo con respeto a un representante popular: me parece que estoy oyendo a un funcionario del SAT. Me preocupa mucho, porque aquí se ha dicho que han tenido ustedes reuniones muy en lo oscurito con los funcionarios de Hacienda. Me parece que lo que estamos viendo es otra manera de seguir jorobando a los que ya de por sí tienen serias complicaciones".
Mientras la diputada Bernal argumentaba desde la tribuna en favor de su propuesta, como un pelotón que recibe una orden los legisladores del PRI siguieron la directriz de abandonar el salón de plenos para evitar que hubiera quórum a la hora de votar en lo general las propuestas. Wintilo Vega solicitó en ese momento a Heliodoro Díaz que verificara la asistencia, y mientras el mismo diputado priísta les gritaba a sus compañeros "¡Vámonos, vámonos, vámonos!", el presidente de la Cámara decretó que no existía asistencia suficiente para continuar la sesión y la dio por concluida. Para sorpresa de la mayoría, convocó para iniciar una nueva sesión una hora después.
En ese inter, los priístas abandonaron definitivamente el Palacio Legislativo. El perredista Arturo Nahle calificó el proceder de los representantes del PRI: "tienen miedo de que la reforma se aplique a la esposa y a los hijos de Arturo Montiel, quienes no están dados de alta en Hacienda y, sin embargo, ostentan diversas y millonarias propiedades en México y el extranjero".
Pasadas las 21 horas, el presidente de la Cámara inició la nueva sesión, y ya sin los priístas, con pocos panistas y la mayoría de perredistas en el pleno no se alcanzó el quórum para comenzarla. Sólo había 157 diputados en el salón.
Al concluir, Heliodoro Díaz convocó a los diputados que integrarán la Comisión Permanente del Congreso de la Unión para instalarse mañana junto con los senadores en la Cámara de Diputados.
Y mientras él aseguraba que no se violaba el reglamento del Congreso por no clausurar la ultima sesión, perredistas y panistas entonaron el Himno Nacional.
Los diputados que integrarán la Comisión Permanente son: por el PRI, Heliodoro Díaz, Enrique Burgos, Sofía Castro, Rebeca Godínez, Bono Ortega, Julián Nazar, Miguel Lucero y Mario Alberto Zepahua; Federico Döring, Blanca Gámez, Renato Sandoval, Angélica Ramírez y José Bermúdez, por el PAN; Ema Figueroa, Iván García Solís y Rosario Herrera, por el PRD; Jorge Legorreta por el PVEM; Joel Padilla por el PT y Jesús Martínez Alvarez por Convergencia.