La novedad del proyecto del senador es que promueve crear una Afore pública
Plantea Joel Ayala reforma a la ley del ISSSTE; es similar a propuesta de Fox
De modo sorpresivo, el senador priísta Joel Ayala Almeida presentó ayer una iniciativa de reforma a la Ley del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) que en esencia retoma la propuesta y los argumentos del gobierno federal en materia de pensiones.
La iniciativa plantea crear un nuevo esquema para el retiro basado en cuentas individuales, incrementar las aportaciones del gobierno y los trabajadores (de 7 a 12.7 por ciento), elevar progresivamente la edad mínima de jubilación hasta llegar a 65 años y sumar la cuota social del Estado.
La novedad del proyecto radica en que propone la creación de una Afore pública para administrar las pensiones de los más de 2 millones de trabajadores.
El nuevo organismo, al que llamarían Pensionissste, estaría conducido por una junta de gobierno con participación de representantes de los sindicatos que afilian a trabajadores al servicio del Estado.
Los ahorros se invertirían preferentemente en la construcción de vivienda y carreteras, así como en la generación de energía y la producción de gas y petroquímicos, entre otros rubros que fomenten la actividad productiva nacional.
La iniciativa precisa: "las inversiones que administre el Pensionissste se llevarán a cabo siempre a través del mercado de valores y mediante instrumentos de la más alta calidad que garanticen el mejor rendimiento con el menor riesgo posible".
También destaca que el Pensionissste tendrá un objetivo social, no de lucro, y los rendimientos de la inversión se canalizarán a fortalecer el ahorro de los trabajadores.
Esta nueva Afore pública operará con recursos obtenidos por las comisiones que obtenga de la administración de los fondos de pensiones y no recibirá subsidio alguno del gobierno o del ISSSTE.
Cuatro seguros
En un esquema similar al adoptado por el IMSS en 1997, la iniciativa de Ayala Almeida, quien es además el dirigente de la Federación de Sindicatos de Trabajadores al Servicio del Estado (FSTSE), plantea que debido a la naturaleza propia de los riesgos que implica el nuevo sistema pensionario se propone agrupar los 21 servicios y prestaciones que tiene la ley vigente del ISSSTE en cuatro seguros: retiro, cesantía en edad avanzada y vejez; invalidez y vida; riesgos de trabajo, y salud.
En lo que se refiere al seguro de salud, la propuesta del senador priísta deja abierta la posibilidad de que se establezcan "esquemas de control no onerosos para los pacientes", con la finalidad de evitar los excesos en la demanda de medicamentos. Resalta que en otros países se han aplicado estrategias de este tipo con excelentes resultados, aunque tal redacción implica la posibilidad de que se pretenda cobrar algunos fármacos a los pacientes.
La iniciativa no logró el consenso en la bancada priísta, ya que además de haberla presentado a última hora, al finalizar el periodo de sesiones, el ex dirigente del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación Tomás Vázquez Vigil retiró su firma de la iniciativa ayer por la mañana.
Durante la reunión previa a la sesión que llevaron a cabo los senadores priístas, Vázquez Vigil no dio mayores explicaciones, sólo señaló que no avalaba la iniciativa, lo cual creó algunos problemas técnicos ya que se debió sacar su fotografía del documento impreso en la gaceta parlamentaria.
Inclusive, el personal de apoyo parlamentario tuvo que arrancar la primera hoja a cada uno de los más de 200 ejemplares y bloquear por un tiempo el acceso a Internet para corregir el documento.
La decisión de Vázquez Vigil es resultado de la pelea entre Elba Esther Gordillo y Joel Ayala, quien no pierde oportunidad para insultar a la profesora e insistir en que se le expulse del PRI.
Otros legisladores del tricolor sí tienen divergencias de fondo con la iniciativa, por considerar que se trata de una propuesta gubernamental que, en todo caso, debió mandar el Ejecutivo al Senado.
La exposición de motivos del proyecto también repite los criterios catastrofistas que mucho ha manejado el gobierno federal, en el sentido de que la situación financiera del instituto es insostenible y que de no haber reforma a la ley, para resolver el problema de las pensiones, sería necesario incrementar las cuotas de los trabajadores a 44.5 por ciento del salario base de cotización y aumentar la edad de retiro a más de 75 años.
Debido a la abultada agenda que ayer debió desahogarse antes de clausurar el periodo, las iniciativas ya no se presentaron ante el pleno, y de manera global se turnaron a comisiones.