El penalti
La propaganda está siendo el último recurso del grupo foxista-salinista para seguir detentando el poder, en una actitud ya abiertamente desquiciada que sólo evidencia su desprecio por los mexicanos.
1. La vergonzosa campaña propagandística orquestada desde Los Pinos al inicio del último año de gobierno pretende no sólo poner de pie la deteriorada imagen de Vicente Fox, y así elevar las escasas posibilidades de Felipe Calderón y del PAN para 2006, sino que busca legitimar como supuestamente "democráticas", afirmando que "ya todo cambió", las políticas entreguistas de Fox, que son las mismas del salinismo, y que no han logrado más que empobrecer a la mayoría de los mexicanos para beneficiar a las multinacionales y a los grupos que financiaron a Fox.
2. El costosísimo operativo de Estado para levantar a Fox en lo que resta del sexenio a través de publicidad, y que está destinado al fracaso, insiste de manera muy burda en tratar de imponer el engaño del "cambio", a sabiendas de que el pueblo no lo cree. La "alternancia", que se quiso presentar como supuesta "transición democrática", y que se dijo llevaría a un régimen político que permitiría mejorar las condiciones de vida del pueblo, no ha sido más que un periodo de prosecución de las mismas políticas antipopulares y antinacionales de los gobiernos priístas, que han consolidado las mismas estructuras de dominación y los mismos intereses.
3. El balance que se haga del foxismo en los próximos meses será de los más negativos que gobernante alguno haya dejado en el país. Fox, con su familia y la de Marta Sahagún, se van enriquecidos de su paso por el poder, pero dejan un país en ruinas, en un escenario de desastre mayor que el que existía en 2000. En México hay una situación social desquiciada con un desempleo sin precedentes, y un desastre institucional, con las áreas estratégicas del Estado sometidas al control de agencias estadunidenses, las riquezas básicas en manos de las trasnacionales y los aparatos de seguridad estatales bajo el dominio del narco.
4. Las denuncias de que las estructuras de la Procuraduría General de la República (PGR) y de la Agencia Federal de Investigaciones (AFI) se hallan bajo el control del narcopoder, reiteradas luego de la difusión de un video en el que se ve el secuestro y tortura de miembros del grupo Los Zetas, difundido en noviembre por The Dallas Morning News, no son enfrentadas por el gobierno foxista más que con declaraciones y con propaganda en los medios. La gravísima situación que se ha producido por la alianza de Fox con Salinas y la protección que ha brindado durante cinco años a determinados cárteles (Proceso 1519), muestra el grado de complicidad de Fox con el crimen organizado y su vinculación con los más turbios intereses, pero también la corrupción de narcoempresarios, de la banca y del aparato estatal.
5. La corrupción del régimen foxista no se refleja, empero, sólo en el enriquecimiento ilícito de Fox y de sus amigos, sino en las prácticas derivadas de sus componendas con el PRI. El arreglo de impunidades negociado por Fox con el salinismo, que supone la impunidad de Madrazo y de Montiel a cambio de la impunidad de los hijos de Marta Sahagún es botón de muestra de lo que ha sido este sexenio: un paraíso de impunidad para quienes gobiernan.
6. El fallido operativo de propaganda montado por Los Pinos con jóvenes recluidos en el Centro de Tratamiento de San Fernando (12 de diciembre), a los que Fox quiso utilizar para presentarse como un gobernante preocupado por la juventud, ha desnudado por eso aún más, ante el estupor oficial, a la campaña foxista. El operativo propagandístico, según los medios, suponía que Fox iba a tirar un penalti que un recluso dejaría pasar, y que luego se retrataría con los muchachos en aparente cordialidad, pero todo falló. El tiro penal fue detenido por el joven portero, haciendo Fox el ridículo, y unos instantes después, al tomarse la foto, uno de ellos, Santiago González, le puso "los cuernos" a Fox en imagen que publicaron los medios nacionales y que dio la vuelta al mundo. El operativo de propaganda terminó al día siguiente por mostrar el carácter policiaco y represivo de centros que deberían ser de rehabilitación cuando, por el carácter vengativo de Fox, la SSP aisló a los dos jóvenes que lo ridiculizaron, lo que suscitó un escándalo durante varios días que lo obligó a declarar que no se tocaría al joven y que él lo iba a "ayudar" (15 de diciembre), cuando quien necesita ayuda siquiátrica -y urgente- es él.
7. El hecho de que un gobernante tan corrupto como Fox recurra impunemente de manera tan sucia a hacerse publicidad todos los días, tratando de salvar la imagen desastrosa de su gobierno, y junto con ella al modelo neoliberal, evidencia de tal suerte aún más el desastre institucional que se vive.
8. A nadie extraña, por consiguiente, que la tregua político-electoral de este diciembre de 2005, promovida por Fox y el PRI, y ordenada por el IFE, esté siendo violada de manera cínica por el propio Fox y por el candidato panista Felipe Calderón, que están actuando como los tramposos de siempre. Lejos de guardar silencio sobre 2006, Fox ha seguido apareciendo cotidianamente como un obseso agitador panista en anuncios pagados y en discursos y declaraciones diarias, y Felipillo ha proseguido su campaña, como hizo al organizar un acto para pasarle la charola a empresarios alemanes (14 de diciembre), buscando las notas en los diarios y confiado en que para Televisa, que lo está promoviendo, no existe tampoco tregua alguna.
9. En esta lógica desquiciada del poder no sorprende que la apuesta de Fox esté en radio y televisión como medio esencial de control del pueblo, y en especial en Televisa, erigida ya en un poder sobre el poder, pues tras el primer decretazo de 2002 (con el que les obsequió los tiempos oficiales), y del segundo de 2005 (con el que les renovó sus 225 concesiones hasta 2021), por las nuevas reformas legales, la llamada ley Televisa pretende desaparecer las radios comunitarias, liquidar a la mayoría de los concesionarios radiofónicos y garantizarle al consorcio, por 20 años más, las nuevas concesiones "digitales".
10. El gobierno de los empresarios, por los empresarios y para los empresarios, como lo definió Fox a inicios del sexenio, se sigue caracterizando en su debacle por su desprecio al pueblo, pero no va a tardar en volver a la realidad.