''No es un producto popular; lo comprará quien puede'', define Ofelia Medina

Presentan al jet-set la muñeca de Frida

ARTURO JIMENEZ

La muñeca Frida Kahlo, con un tiraje mundial de 100 mil ejemplares, que ya fue "rebasado" por los pedidos en varios países y que tendrá un costo de 250 dólares por pieza, tuvo su presentación en sociedad la noche del miércoles en el Museo Casa de la Bola.

En la ceremonia, realizada en el mejor estilo de los eventos de sociales, sólo se pudo observar entre la concurrencia a los pintores Rina Lazo y Arturo García Bustos, así como a la actriz Ofelia Medina, quien interpretó algunas canciones que le gustaban a Frida.

Sobre las polémicas muñecas de colección (La Jornada, 24/XI/2005), que se venderán en tiendas departamentales, Medina dijo a la prensa:

''Para mí no es ninguna controversia que haya una muñeca Frida Kahlo. Lo veo muy bien''. Y agregó: "La señora Isolda Kahlo (sobrina de la pintora) tiene todo el derecho para hacer lo que sea".

Acerca de los planteamientos de la crítica de arte y biógrafa de la pintora Raquel Tibol, para quien el lanzamiento de productos como la muñeca son ''perversiones'' mercantiles, Ofelia Medina comentó: "Allá Raquel Tibol. Ella comercializa por su lado. A mí no me parece que haya ninguna controversia".

Respecto del tequila con el nombre de la pintora, con las versiones "añejo", "reposado" y "blanco", la actriz argumentó en favor que existen vinos con los nombres de artistas como Picasso y Chagall. En cuanto al precio, dijo que la muñeca ''no es un producto popular'' y lo comprará ''quien pueda".

Un reportero le recordó su oposición a la película sobre Frida Kahlo, producida y protagonizada por Salma Hayek, y Ofelia Medina aclaró: "Nunca me opuse, sino que, simplemente, la versión que daban de la vida de Frida Kahlo me parecía rasurada. Era una Frida sin bigotes. Pero una muñeca no es una escultura de Frida Kahlo. Todo tiene que estar en su lugar".

En torno a declaraciones de familiares de la artista, como la nieta y bisnieta de la hermana de la pintora, Mara Romeo Pinedo y Mara de Anda, representantes de Frida Corporation, así como de Cristina Dorsett, directora de la empresa diseñadora y fabricante Muñecas Eny, para quienes la muñeca "refleja el espíritu" de la pintora, Medina se manifestó en desacuerdo, pero insistió en que no había mayor problema en comercializar una muñeca de la compañera de Diego Rivera.

"Por mí que hagan una muñeca, un satélite, un tren y un avión que se llamen Frida Kahlo. Qué bueno. Ella está muerta de risa desde un astro, mirándonos aquí haciéndonos bolas. Y al que no le guste el fuste y el cincho no le cuadre, que agarre caballo y fuste... y ya".

En la presentación Cristina Dorsett insistió en que la muñeca y la caja, así como el vestido de tehuana y la joyería, son una "obra de arte" y que espera ganar un concurso en Alemania.

Luego, en el patio central de la Casa de la Bola, los distinguidos invitados, entre ellos personajes del mundo del diseño de ropa, departieron acompañados por música new age, tecno y la presentación de la Orquesta de la Sociedad Filarmónica de Conciertos. En un pedestal destacaba la actriz Fabiola Martínez, quien caracterizaba a la pintora.

En otros pedestales, encerradas en vitrinas y cubiertas por gasas, podían adivinarse los rasgos dulces de varios ejemplares de la nueva muñeca de Eny, que pretende representar a quien más supo reflejar, en vida y obra, la fortaleza y el dolor humanos en todas sus manifestaciones.