Feministas y conservadores critican la publicación
Genera revuelo en India la autobiografía de una prostituta
Nueva Delhi. 18 de diciembre. Con su pelo largo, negro, ondulado y mal recogido, Nalini Jameela, de 50 años, luce como cualquiera otra ama de casa de la India.
Pero esta madre atractiva y sin estudios es autora de un libro de éxito y prostituta cuyas francas opiniones acerca del trabajo sexual como una elección han provocado una polémica en la India conservadora.
Su Autobiografía de una trabajadora del sexo, dictada a una activista social, debido a su analfabetismo, ha enojado tanto a feministas, quienes dicen que glorifica el trabajo sexual, como a los conservadores, quienes piensan que las prostitutas deben quedarse calladas.
"He escrito este libro para las otras trabajadoras del sexo. Quería hablar del tema para que nos libremos del sexo. Quería hablar del tema para que nos libremos del estigma", contó en una conversación telefónica Jameela a Reuters, por medio de un traductor desde Kerala, su estado natal.
"La gente piensa que somos malas porque tenemos sexo a cambio de dinero. Nadie entiende nuestro dolor", agregó.
Jameela empezó a prostituirse por necesidad hace 25 años, cuando su primer marido murió, dejándola sola para mantener a su hijo. Con el trabajo sexual ganaba más de lo que percibía en una fábrica. Les cobra a sus clientes entre 500 y mil rupias, unos 11 a 22 dólares por visita.
Su primer cliente fue un policía. Cuando salió de la habitación a la mañana siguiente, fue apaleada por agentes por órdenes de otro oficial que ella había rechazado.
Jameela estima que ha mantenido relaciones sexuales con más de mil hombres desde entonces, y siente que su trabajo es un servicio social importante.
"Si no hubiese trabajo sexual, todo conduciría a una situación comparable con una olla a presión con la traba puesta. La verdad es que las trabajadoras del sexo brindan un gran servicio", dice en su libro, escrito en el idioma sureño malayalam.
Y esa es una postura que enoja a algunas feministas.
"La prostitución es considerada trabajo" en el libro, dice K. Ajitha, presidenta de Anweshi, un grupo de mujeres de Kerala. "No lo acepto. Las mujeres que se prostituyen sólo tienen el derecho de vender sus cuerpo, no tienen el derecho de elegir".
Escrito junto a I. Gopinath, una activista quien trabaja con prostitutas, el libro ha vendido más de 10 mil copias en menos de seis meses, en un mercado en donde 5 mil ejemplares al año ya califican como bestseller. Jameela hasta ahora ha ganado 84 milrupias, mil 830 dólares, por las ventas de su libro.
Pero en India las manifestaciones públicas de afecto están mal vistas y hablar de sexo en público es todavía un tabú.