Usted está aquí: viernes 6 de enero de 2006 Política ''Si Guillermo hubiera sido pollero no habría vivido en una vecindad''

El hermano del mexicano asesinado ratifica que la Patrulla Fronteriza tiró a mansalva

''Si Guillermo hubiera sido pollero no habría vivido en una vecindad''

La PGR coincide: ningún reporte de que el occiso se dedicara al tráfico de personas

ANTONIO HERAS Y GUSTAVO CASTILLO CORRESPONSAL Y REPORTERO

Tijuana, BC, 5 de enero. Agustín, hermano de Guillermo Martínez Ramírez, el migrante de 18 años asesinado por un agente de la Patrulla Fronteriza, desmintió la versión del gobierno estadunidense sobre los hechos del 30 de diciembre.

Guillermo recibió un disparo de un agente, confirmó quien lo acompañaba ese día, cuando intentó cruzar la frontera y recibió de Faustino Campos, elemento de la Patrulla Fronteriza adscrito al área de San Diego, un tiro en la espalda.

Cuestionado sobre la versión de la Patrulla Fronteriza de que el migrante muerto se dedicaba al tráfico de indocumentados, Agustín rechazó la acusación; si hubiera sido así, explicó, Guillermo no habría vivido en una vecindad de una colonia marginada, ni trabajado en la industria de la construcción.

La Procuraduría General de la República (PGR) coincidió con el dicho de Agustín: la dependencia no tiene informes de que Guillermo estuviera involucrado en el tráfico de personas.

Las fuentes consultadas informaron que el migrante asesinado intentó cruzar a territorio estadunidense en más de 15 ocasiones, pero nunca acompañado de otras personas o como guía de grupos de indocumentados.

En las diversas ocasiones que Martínez Rodríguez fue devuelto a territorio mexicano, nunca se le señaló como integrante de alguna organización dedicada al tráfico ilegal de personas.

En una diligencia que duró cuatro horas, en las oficinas de la zona del río, Agustín reiteró su declaración de que la noche del 30 de diciembre, cuando trataron de pasar por el cañón Zapata, coincidieron con otras tres personas a las que más tarde ''perdieron de vista''.

Primero ingresó a territorio estadunidense Guillermo y después Agustín. Vio correr a su hermano hacia la barda, por lo que Agustín también se puso a salvo y desde la barda presenció la agresión del oficial mexicoestadunidense.

Representantes de la policía de San Diego estuvieron presentes en la necropsia, al igual que personal de homicidios de y agentes de enlace internacional, así como del consulado mexicano en San Diego.

El hermano del migrante muerto solicitó el apoyo consular y de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos para que sus representantes permanecieran en las diligencias judiciales.

Por la mañana, Agustín participó en la garita internacional de San Ysidro en la investigación que realiza la Policía de San Diego, donde fue interrogado y al parecer confirmó su dicho.

Para las próximas horas se programó una reconstrucción de los hechos en la zona del cañón Zapata, en el vado que se encuentra entre las dos bardas, donde fue herido Guillermo.

La comparecencia de Ofelia Rodríguez ante el Ministerio Público Federal, convocada para este mismo jueves, se pospuso para las próximas horas. En ella la señora confirmará la información que proporcionó al momento de identificar el cadáver de su hijo.

La tarde del miércoles, en apoyo a la agencia del Ministerio Público, los peritos de la procuraduría estatal realizaron un estudio de criminalística de campo para establecer lugar y modo del hecho.

 
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