Después lo admite pero exige: "no hagan escándalo"
Funcionario intenta ocultar llegada a Salamanca de cargamento tóxico
Salamanca, Gto., 5 de enero. "Luego de deambular por varios estados del país, donde nadie los aceptó", fueron recibidos en la empresa Sem Tredi de México, asentada en Salamanca, 270 transformadores que contienen una tonelada de askarel, sustancia altamente tóxica, sin que las autoridades panistas lo hayan evitado, denunció hoy Jesús Alberto Castro, presidente de la agrupación Fuerza Salmantina por el Medio Ambiente.
El cargamento, enviado de Hermosillo, Sonora, sería depositado temporalmente en el laboratorio de pruebas de equipos y materiales de la Comisión Federal de Electricidad en Irapuato. Pero Roberto Domínguez Herrera, director de Protección Civil de esta última localidad, pidió a las autoridades municipales, mediante un oficio fechado el 2 de enero, oponerse "de manera enérgica y determinante al traslado o recepción, ya sea temporal o permanente, de los contenedores que han vagado por varios estados de la República, buscando ser aceptados, sin haberlo logrado".
Entonces los transformadores fueron remitidos a Sem Tredi de México, cuyo gerente, Alfredo López Elizarrarás, reconoció la existencia de askarel en los transformadores, "aunque no puedo precisar la cantidad, porque todavía no son abiertos ni serán tratados aún".
Horas después, el subdirector de Ecología, Jorge Baca, se presentó en esa empresa "por orden directa del alcalde", dijo, y aseguró: "constaté que no había askarel; eso es una desinformación".
-Los responsables de la empresa confirmaron la presencia de la sustancia tóxica -le comentó un reportero.
-No hagan escándalo, nada más es poquito askarel el que llegó a la ciudad -respondió.
Alberto Castro repuso que ante la "desfachatez de los funcionarios que sólo buscan conservar su trabajo por encima de la protección del medio ambiente y de la población, nos hemos propuesto dar un ultimátum como organizaciones civiles al gobierno municipal para que busque, con las autoridades estatales y federales, remediar la situación de la grave contaminación que se vive en Salamanca; de lo contrario, tomaremos medidas más severas".
El diputado local Juan Alcocer Flores, del grupo Fuerza Salmantina por el Medio Ambiente, criticó a las autoridades panistas de Salamanca por "permitir que seamos el cementerio industrial de México y no levantar la voz y decir basta"; tan es así que en esta ciudad, señaló, se concentra casi medio millón de "pasivos ambientales sin que nadie haga algo".