A diario recibe hasta 2 mil 500 toneladas de desechos
Saturado, el tiradero de Ecatepec; no se ampliará por falta de terrenos
Ecatepec, Mex., 7 de enero. El depósito donde el ayuntamiento de Ecatepec vierte diariamente 2 mil toneladas de basura está a punto de concluir su vida útil y ya no puede crecer por falta de terrenos. Los tres ayuntamientos recientes han cometido desaciertos y omisiones que sólo han postergado la solución del problema.
A principios de octubre, el alcalde Eruviel Avila Villegas concesionó la disposición final de desechos a Asia Automotores de México (Asiamex), empresa que promete soluciones en un año, lo que se ve difícil porque, además del problema de la basura, habrá de enfrentar la inconformidad de los ejidatarios que han amenazado con denuncias penales y juicios agrarios.
Con una hectárea que el ayuntamiento adquirió en la parte alta del ejido de Santa María Chiconautla, el tiradero municipal fue abierto en 1989. Pronto se vio rebasado y se adquirieron más hectáreas, hasta sumar 15.
Los enormes socavones que dejó la explotación de tepetate en ese sitio pronto comenzaron a ser cubiertos por montañas de basura y el tiradero está por cumplir su vida útil.
En un municipio donde cada uno de sus casi 3 millones de habitantes produce en promedio 750 gramos de basura diariamente, los desechos que se recolectan en 24 horas han pasado de mil toneladas en 1995 a entre 2 mil y 2 mil 500 en la actualidad, sin contar con que la población de Ecatepec aumenta en 200 mil personas al año.
La administración del priísta Jorge Torres (1997-2000) comenzó a tomar medidas, pero erradas. En 1999 compró una planta compactadora a la empresa española Imabe Ibérica, en 66 millones de pesos.
Se instaló en la zona aledaña al tiradero y tendría capacidad para compactar mil 500 toneladas diarias, pero nunca se echó a andar. Lo que fue presentado como un proyecto innovador pronto se convirtió en un montón de fierros oxidados.
Con el arribo del panista Agustín Hernández Pastrana, en 2000, la planta sólo fue pintada de azul.
A solicitud del gobierno del priísta Eruviel Avila Villegas, en 2003 especialistas del Instituto Politécnico Nacional presentaron un estudio donde proponen convertir la basura orgánica en composta y la inorgánica enfardarla y comprimirla para venderla. Una mínima parte sería confinada.
A partir de esas recomendaciones, el ayuntamiento solicitó al Congreso local la autorización para concesionar por 20 años el manejo del tiradero y la disposición final de los desechos. El 20 de octubre Asiamex tomó el control del basurero y un mes después comenzó su rehabilitación.
Elías Priego y Rodolfo Fuentes Carvajal, director general y director jurídico de la empresa, respectivamente, se comprometieron a echar a andar la planta y complementar sus tareas con procesos de compostación y desecación.
Los comuneros preparan dos denuncias penales contra la empresa debido a que 12.5 hectáreas fueron contaminadas luego de que Asiamex destruyó los bordos que mantenían estancados los lixiviados y éstos se derramaron en las parcelas.
Además, las 15 hectáreas del basurero al menos cinco fueron adquiridas sin cumplir la normatividad, por lo que existen denuncias penales y litigios agrarios interpuestos por ejidatarios de Santa María Chiconautla, quienes demandan la devolución de los predios o un pago justo por su usufructo, dijo Arturo Gachuz Calixto, presidente del comisariado ejidal.