Usted está aquí: martes 10 de enero de 2006 Economía MEXICO SA

MEXICO SA

Carlos Fernández-Vega

La migración a EU, fruto del apartheid económico en el país

Muy cínica la versión del gobierno del cambio: "se van por mejorar, no por falta de trabajo"

ANTE LA RIGUROSA imposibilidad de lograrlo en su país, en el último lustro alrededor de dos millones de paisanos emigraron al vecino país por razones económicas y laborales, y con miras a mejorar su calidad de vida. Ese número representa una tercera parte de la mano de obra que en el periodo se incorporó al mercado laboral mexicano, pero no tuvo cupo en ningún rincón (formal o informal) que permite el excluyente modelito económico, mismo que en esos cinco años logró duplicar la tasa de desempleo abierto (versión oficial).

CERCA DE DOS millones de un total de seis, aproximadamente, no sólo es una delicada pérdida, sino un peligroso foco rojo -socialmente hablando- y uno de los resultados más notorios del modelo de apartheid económico imperante en el país desde hace poco más de dos décadas.

COMO CANDIDATO OFICIAL a la Presidencia de la República de la alianza Por el Bien de Todos, Andrés Manuel López Obrador reiteró la necesidad de un cambio en la política económica, porque la actual "ha llevado al país a la quiebra, canceló la movilidad social y provocó un repunte en la migración a Estados Unidos. Es indignante ver cómo el presidente Vicente Fox -por su empeño en mantener la misma política económica que sólo beneficia a las elites del poder- no tiene la autoridad moral ni política para enfrentar la ignominia de un muro fronterizo ni protestar por la muerte de migrantes. El fracaso de la política económica es el fracaso de la política migratoria del Presidente", dijo.

Sin embargo, el gobierno del "cambio" tiene otra lectura, sin lugar a dudas, muy cínica: la creciente expulsión de mano de obra mexicana -principalmente a Estados Unidos- muestra el "éxito" de sus políticas (económica, social y migratoria), toda vez que en sus cinco años en Los Pinos el país ha captado alrededor de 70 mil millones de dólares por remesas, cantidad casi tres tantos superior a la obtenida en el mismo lapso de la administración previa)

LAS POLITICAS ECONOMICA y migratoria son big hits del "cambio", dicen en Los Pinos, de allí que se animen a dar una versión muy novedosa de los por qué de la migración. Explicó ayer el vocero presidencial que "las estadísticas revelan que un número muy, muy alto, de las personas que emigran a Estados Unidos tenían trabajo en México, no emigran por no tener trabajo, sino por otras condiciones también de carácter cultural, porque esperan una mejor condición de vida a pesar de que aquí tenían trabajo, no se están yendo porque no lo tengan en México".

CON ESA VERSION se complica aclara cómo es posible que ante la generosa oferta laboral en el país -según Rubén Aguilar- y el creciente número de vacantes de la paisanada que cruza el río Bravo, la tasa oficial de desempleo abierto sea dos veces mayor ahora que cuando el presidente Fox se sentó en Los Pinos. Más difícil es entender por qué en Estados Unidos celebren que alrededor de 130 mexicanos indocumentados son detenidos cada hora por autoridades migratorias, para alcanzar un millón 200 mil personas, aproximadamente, en 2005.

EL VOCERO PRESIDENCIAL además aseguró que "si vemos las estadísticas, en los últimos años ha disminuido la migración, producto de que la política social de Estado está dando resultados, mediante la reducción de la pobreza extrema, como ustedes conocen, a través de una serie de servicios públicos que llegan a las comunidades... Sí se ha reducido y es enorme la estadística, por arriba de 80, 85 por ciento que la gente que emigra tiene un trabajo en México, no es que careciera de trabajo".

Lo bueno es que duermen tranquilos.

LA PROPIA INFORMACION gubernamental señala que a partir de 2000, cerca de 400 mil mexicanos anualmente emigran a Estados Unidos, 30 por ciento más respecto al volumen promedio reportado en la década de los 90.

EL CONSEJO NACIONAL de Población lo plantea así: la migración de mexicanos a Estados Unidos es un fenómeno que está adquiriendo un impulso cada vez mayor. La población nacida en México, residente en Estados Unidos, multiplicó su tamaño casi cien veces durante todo el siglo pasado, al aumentar de 103 mil mexicanos en 1900 a 10.3 millones en 2002, pero más de 90 por ciento de este crecimiento ocurrió durante las últimas tres décadas.

EL FLUJO NETO de la migración mexicana hacia Estados Unidos incrementó su tamaño aproximadamente trece veces entre 1960 y 2000, al pasar de 30 mil personas al año en el periodo 1965-1970, a 390 mil en 2000-2002, crecimiento que se ha mantenido. Ese monto representa alrededor de la tercera parte del flujo de migrantes que llegan anualmente a estados Unidos.

LA MIGRACION MEXICANA tiene carácter esencialmente laboral, asociado principalmente a la persistencia de una demanda de trabajadores mexicanos en Estados Unidos, a la existencia de enormes brechas salariales entre ambas economías y a la insuficiente capacidad de la economía mexicana para absorber el número creciente de su mano de obra, es decir, razones de orden económico y bienestar. La mayoría de los emigrantes mexicanos (60 por ciento) se concentra en edades que van de 15 a 39 años.

EL SECTOR TERCIARIO de la economía estadunidense absorbe a la mayor parte de la población mexicana ocupada, al igual que en el resto de los grupos de inmigrantes y de los nativos de aquel país. Sin embargo, los mexicanos participan en menor proporción en servicios distintos a los de reparación y comercio al menudeo.

LA PRESENCIA RELATIVA de los mexicanos en actividades del sector primario y secundario es mucho mayor que en los otros grupos poblacionales, situación que se deriva principalmente de su mayor participación en actividades agrícolas (8 por ciento) y en la industria de la construcción (17 por ciento).

Las rebanadas del pastel:

ORA PRO NOBIS. Sigue la fiesta de la ultraderecha clerical: monseñor Fox designó a sor Ana Rosa Payán como directora general del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia, relevo de la hermana Ana Teresa Aranda, ahora en la Secretaría de Desarrollo Social. La Asociación Nacional Cívica Femenina, Provida, la Unión Nacional de Padres de Familia y demás democráticas organizaciones rezan por ella.

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