Oscar Echavarría confesó haber mentido; no estuvo con ella como había declarado
El accidente de Belem Guerrero propició que rompiera con su entrenador cubano
Giuseppe Grassi, candidato a entrenar nuevamente a la pedalista, adelantó Rodrigo González
El accidente de Belem Guerrero propició que la ciclista rompiera definitivamente con su entrenador Oscar Echavarría, luego de confesarle a Nelson Vargas, dirigente de Comisión Nacional de Cultura, Física y Deporte (Conade), lo sucedido el día del percance, que agudizó la mala relación laboral que ya tenía con el técnico cubano desde hace varios meses.
Con el rostro desencajado, ojos llorosos y las manos temblorosas, Echavarría aceptó la decisión de la subcampeona olímpica, quien se encuentra convaleciendo en su casa de Santiago Tequesquitengo, con la quien no ha podido entablar comunicación desde que fue dada de alta en Toluca, luego del accidente que sufrió el pasado 20 de diciembre, cuando entrenaba sola por esos lugares y fue arrollada por un camión.
En inusual conferencia de prensa, a la que asistió Vargas Basáñez y Rodrigo González, subdirector del deporte de calidad en la Conade y del fideicomiso CIMA, en la sala de juntas del dirigente de ese organismo, Echavarría confesó haber mentido al decir que estaba en una gasolinera al momento del percance, cuando en realidad se había quedado dormido en el hotel donde se hospedaba.
Dijo que no pudo acompañar a Belem quien, según sus palabras, había decidido entrenar sola como regularmente lo hace, porque "90 por ciento de los ciclistas en México practican solos''.
-¿Mintió, entonces?
-Sí, mentí para salvar a una persona. Vamos a ser claros. El chofer no tenía licencia para manejar y decidimos que se fuera sola -respondió, aunque aceptó su responsabilidad en el hecho e intentó justificarse al señalar que el ciclismo es un deporte de riesgo y que a sus pupilos les ocurre ese tipo de accidentes.
Luego de reconocer que durante los tres años y medio en que trabajaron juntos y compartieron la medalla de plata olímpica en Atenas 2004, el técnico caribeño deseó la pronta recuperación de su ex alumna, a quien definió como una deportista de gran capacidad y talento, ya que continuará trabajando ahora en las fuerzas básicas para preservar el convenio deportivo que existe entre la Conade y Cuba.
Lo que debía tratarse con la seriedad que ameritaba el caso se efectuó inicialmente entre risas de los convocantes a la conferencia y se llegó al extremo de comparar esta relación con la existente entre el técnico de la selección nacional, Ricardo La Volpe, y Cuauhtémoc Blanco, cuando Vargas en su intervención pidió que no se tomara como una "situación lavolpista'' ni como un "asunto mediático''.
Tras calificar la separación definitiva entre Guerrero y Echavarría de un rompimiento "normal'' entre profesionales, indicó que la ruptura ya se había dado desde tiempo atrás, aunque ahora no hayan dialogado entre ellos, por lo que debió intervenir él como se lo pidió la ciclista cuando la fue a visitar al hospital a principios de año.
Ahora lo importante será que Belem Guerrero se alivie totalmente de las lesiones de la clavícula, la columna, pierna, pero sobre todo de la cadera, porque lo primordial es que se recupere y tenga la paciencia suficiente para seguir las recomendaciones médicas de reiniciar su trabajo en la bicicleta fija y no salir a la carretera, como lo desea la deportista, comentó Vargas Basáñez.
Por su parte, González Sesma dijo que se analizarán las propuestas para determinar quien tomará el puesto de Echavarría, aunque adelantó que podría regresar a entrenar con el italiano Giuseppe Grassi.
Sin embargo, precisó que lo prioritario ahora es que la ciclista recupere su salud antes de pensar si participará o no en el Mundial de Francia, en abril próximo, y mientras tanto será la Conade la que informe todo lo relacionado con la pedalista, quien no desea tener contacto directo con los medios.