Serán comicios muy animados; lastre, evasión fiscal
Descarta Guillermo Ortiz volatilidad por las elecciones presidenciales
Guillermo Ortiz, gobernador del Banco de México, descartó episodios de volatilidad relacionados con el proceso electoral de julio próximo. "Vamos a tener mucho ruido, porque serán unos comicios muy animados. Habrá algunos momentos de volatilidad, pero no creo que ocurra nada que llame la atención". Es urgente, dijo, "tirar el lastre" que representa la excesiva regulación, la evasión fiscal y la ausencia de reformas.
Dijo que la inflación repuntará en el primer bimestre, pero después se controlará y regresará a su tendencia decreciente. El funcionario adelantó que el producto interno bruto crecerá entre 3 y 3.5 por ciento, en lo que coincidió con el secretario de Hacienda, Francisco Gil Díaz.
Al participar en el seminario Perspectivas Económicas 2006 organizado por el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM), Ortiz Martínez dijo que para crecer de manera más vigorosa en materia económica, primero hay que "tirar el lastre. Somos como un barco que está lastrado, que trae ahí fardos" y hay que tirarlos para ir más rápido.
Este lastre, agregó, está presente en todos los sectores. Uno de ellos es la excesiva regulación, que nada tiene que ver con el Congreso. Llevamos años hablando de desregular y los resultados no han sido satisfactorios. Todos los estudios señalan que México sigue siendo un país excesivamente regulado, donde para abrir un negocio se necesitan 50 días hábiles, aseveró Ortiz Martínez.
"No se diga -agregó- de los temas fundamentales de la economía como el energético; el fiscal donde la evasión es gigantesca, porque tenemos un sistema tributario extremadamente complejo y mal diseñado, que ha sido difícil de modificar".
El gobernador del Banco de México afirmó que también existe una legislación laboral extremadamente rígida. "Ese es otro lastre, y la flexibilidad en materia laboral es algo que todos los países asiáticos tienen y por ello han logrado avances en su economía".
Precisó que todo esto no es nuevo, porque la radiografía del país está muy bien hecha. "Hay estudios y evaluaciones académicas, y ahora la esperanza es que todos estos temas se puedan ventilar de manera abierta durante este año electoral, porque necesitamos crecer, más empleo y reducir los niveles de pobreza. Esperamos a ver que plantean los candidatos a la Presidencia de la República".
En su exposición en el seminario del ITAM, consideró que la aplicación de políticas macroeconómicas prudentes ha conducido a México hacia una posición mucho menos vulnerable ante choques externos o internos. Sin embargo, aclaró que la estabilidad macroeconómica es una condición necesaria, pero no suficiente para lograr un crecimiento sostenido.
Aseguró también que los avances que se han logrado influyen fundamentalmente a través de sus efectos sobre la demanda agregada. El reto actual es llevar a cabo cambio estructurales que flexibilicen la estructura productiva de la economía y que, de ese modo, impacten positivamente su crecimiento potencial.
Insistió en que la economía mexicana muestra considerables rigideces en los mercados de bienes y de factores de producción, especialmente en el laboral, así como fallas de tipo institucional que dificultan un desarrollo económico más acelerado.
Estas rigideces y fallas, concluyó, conducen a un ajuste más lento y costoso por el lado de la oferta agregada ante diversos choques. Esto limita la capacidad de la economía de adaptarse ante cambios en el entorno y, por ende, reduce su competitividad y su crecimiento potencial.