La nueva disposición irrita a varios pasajeros
Aduanas pone en operación un escáner tridimensional en el AICM
De manera sorpresiva y casi arbitraria, la Dirección General de Aduanas puso anoche en operación en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) dos escáner tridimensionales, los cuales prácticamente desnudan a las personas. Los aparatos comenzaron a ser utilizados en la salida internacional, conocida como banda ocho, por donde salen los pasajeros procedentes de países de Centro y Sudamérica.
Dicho escáner, cuando meses atrás se anunció su instalación y uso, provocó polémica entre organizaciones no gubernamentales, incluidas la Comisión Nacional de Derechos Humanos y las autoridades aduanales, porque se afirmó que violaba las garantías básicas y la intimidad de los viajeros. Anoche, inclusive, se exigió a un hombre con muletas pasar por uno con las manos en alto. También fueron revisados sus dos hijos, un niño de siete años y una niña de 12, además de la esposa. El hombre, José Fernández Rodríguez, llegó en un vuelo de Avianca procedente de Bogotá.
Otros pasajeros sorprendidos y obligados a pasar por dichos aparatos, "porque hay que cumplir con la ley", fueron Edgar Pacheco, quien llegó de La Habana, y Juan Carlos "N", de Bogotá. Los aparatos, que se asegura no causan daño a embarazadas ni a personas que tienen marcapasos, ocupan prácticamente dos espacios de más de metro y medio de ancho por uno 50 de largo y dos de alto, donde las personas son revisadas en unos 30 segundos.
Lo anterior provocó desorientación y malestar entre los pasajeros que llegaron en vuelos de las aerolíneas Cubana de Aviación, Mexicana, Aviacsa y Aeroméxico. La presencia de los representantes de los medios de información incomodó a los agentes aduanales, quienes pretendieron alejarlos.