PAN, PRI y PVEM aprueban que Ernesto Zamarripa siga en el cargo cuatro años más
Maniobra Fernández de Cevallos para ratificar a un vocal del IPAB
Desde el inicio del actual periodo de sesiones del Congreso de la Unión, el senador panista Diego Fernández de Cevallos no se presentó a ninguna cita, pero ayer sí lo hizo, con el único propósito de negociar, a la vista de todos los presentes, la ratificación de Ernesto Zamarripa Morones como vocal de la junta de gobierno del Instituto para la Protección al Ahorro Bancario (IPAB).
Con su habitual estilo, llamó hasta su curul a sus compañeros del PAN, les dio indicaciones y, en otros casos, platicó en corto con representantes del PRI y del PRD. En menos de 40 minutos consiguió su cometido: se ratificó al vocal que fue recomendado por el también panista Fauzi Hamdam.
Al mediodía, la senadora Lucero Saldaña leyó el dictamen de la tercera comisión de la Permanente, relativo al nombramiento de Ernesto Zamarripa, quien sería ratificado por cuatro años más como vocal del instituto.
Dicho nombramiento fue sometido a consideración del pleno del Senado de la República el pasado 15 de diciembre, pero por falta del quórum requerido -dos terceras partes- no se pudo discutir y, en su caso, aprobar, ante lo cual se difirió el desahogo del tema.
Ayer, sin estar incluido en el orden del día, el PRI y el PAN negociaron para agregarlo entre los temas a discutir. Una vez que el punto se presentó ante el pleno, el senador perredista Cesar Raúl Ojeda Zubieta rechazó la intención de ratificar a Zamarripa de la siguiente forma:
"Estamos de acuerdo en la necesidad de que funcionarios capaces y comprometidos con el país desempeñen cargos de tan alta responsabilidad en el IPAB. En tal virtud, no podemos votar por la ratificación señalada, debido a que el señor Zamarripa ha sido parte de la junta de gobierno en la que se han avalado las decisiones que no cumplen con la ley del propio instituto."
A decir del senador Ojeda Zubieta, el nombramiento de Ernesto Zamarripa no debería aprobarse porque el tema "se encuentra en el limbo" y el asunto sólo puede subsanarse mediante la interpretación jurídica. El artículo 63 constitucional, dijo, dispone expresamente un quórum de más de la mitad para que pueda sesionar cada una de las cámara del Congreso de la Unión:
"En ejercicio de sus potestades, la Cámara de Senadores, el pasado 15 de diciembre, sesionando con el quórum constitucional, atendió y resolvió un dictamen debidamente tramitado. La asamblea de los senadores tomó una decisión amparada en la Constitución y en nuestra ley orgánica. Toda vez que el dictamen no alcanzó la votación requerida por la Ley del IPAB, la mesa directiva decidió desechar el dictamen."
La intervención del legislador perredista y la negativa manifiesta de su partido a revalidar por cuatro años más la permanencia de Zamarripa en el instituto, dio motivo a Diego Fernández de Cevallos para operar entre las curules del Salón Verde del Palacio Legislativo de San Lázaro.
Ya existía acuerdo con el PRI. El PAN sólo requería 26 votos para aprobar la propuesta del Ejecutivo federal de que Zamarripa continuara en su cargo.
En Fernández Cevallos persistía la duda sobre la conjunción de los 26 votos, por lo que se dirigió hasta el lugar de la senadora verde Gloria Lavara y le habló al oído. Después platicó con César Raúl Ojeda Zubieta, quien se negó en todo momento a ratificar el nombramiento de Zamarripa.
Ya en su lugar, Fernández de Cevallos hasta se dio tiempo de corregir un punto de acuerdo al cual daría lectura minutos adelante Federico Döring, a quien ordenó: "Döring, ven". Este respondió al mandato y escuchó la recomendación del senador, a quien le dijo: "Eso ya lo corregimos, tenemos el texto nuevo".
A pesar de la oposición de Ojeda Zubieta y del diputado por Convergencia Jesús González Schmal, y luego de la defensa que de Zamarripa hicieron Juan José Rodríguez Prats y Héctor Larios, la presidenta en turno de la mesa directiva, Rebeca Godínez y Bravo, agotó la participación de los oradores y solicito a la secretaría la votación de los presentes.
La operación de Fernández de Cevallos fructificó con creces, porque 28 senadores y diputados de PRI, PAN y PVEM dieron el sí a Zamarripa.