Derrotó 34-17 a Broncos de Denver
Pittsburgh, campeón de la Americana
Roethlisberger dio cátedra en el emparrillado
Denver, 22 de enero. Acereros de Pittsburgh tuvo que esperar 10 años para estar de vuelta en el Súper Tazón, al derrotar como visitante 34-17 a Broncos de Denver en la final de la Conferencia Americana.
El legendario conjunto negro y oro estará disputando por sexta ocasión el trofeo Vince Lombardi gracias a una sólida defensiva que se encargó de liquidar a Broncos, limitado a sólo 79 yardas por vía terrestre.
El quarterback de Acereros, Ben Roethlisberger, dio cátedra de cómo se juega una final de conferencia; no cometió errores y tuvo la mira bien puesta, prueba de ello fueron los 21 pases que completó de 29 intentos, para 275 yardas y dos envíos de anotación.
Jerome Bettis por fin está en la fiesta grande en su edición 40, que se celebrará el 5 de febrero en Detroit, su tierra natal, después de una brillante trayectoria de 13 temporadas como profesional, que podría culminar con su adiós en los emparrillados.
La gran actuación de Pittsburgh en la primera mitad comenzó con patada de 47 yardas de Jeff Reed, que culminó tras una larga serie ofensiva de 62 yardas, con la cual se abrió el marcador 0-3 en el primer cuarto del partido.
Los pupilos de Bill Cowher continuaron con su dominio guiados por Roethlisberger, quien lideró a su equipo de manera perfecta por aire, por donde se conectó con Cedrick Wilson en pase de 12 yardas para llegar a las diagonales.
El silencio en el Invesco Field era sepulcral; los seguidores de Denver no daban crédito a lo que estaba pasando, pues la ofensiva de su equipo simplemente no caminaba.
Jason Elam fue el encargado de meter a Broncos en el partido, después de enviar el ovoide entre los postes en un intento de 23 yardas que sirvió para acercar a su equipo 3-10.
Pero a partir de ese momento Acereros se apoderó del emparrillado, Roethlisberger nunca sufrió presión alguna que pusiera en riesgo una impresionante serie ofensiva de 80 yardas, que llegó a su fin con acarreo de tres yardas de Bettis hasta la zona de anotación.
Denver intentó responder, pero Jake Plummer cometió un grave error al sufrir intercepción del esquinero Ike Taylor en su propia yarda 39, por lo que el llamado Big Ben lanzó pase de 17 yardas a Hines Ward para anotación. Así, Pittsburgh se fue al descanso con ventaja de 24-3.
La defensa número dos de la liga por fin despertó y pudo detener a los visitantes cuando Plummer envió pase de 30 yardas al receptor Ashley Lelie y poner el marcador 24-10 con el punto extra de Elam.
En el último cuarto Acereros sumó otros tres puntos a la pizarra con gol de campo de 42 yardas de Reed (27-10), pero cuando parecía que Broncos estaba liquidado, Plummer se quitó de encima una captura y metió a su equipo dentro de la yarda 10 de los rivales para que Mike Anderson, con acarreo de tres yardas, lograra anotar y poner a Denver 17-27.
La línea frontal de Denver colapsó en el peor momento, permitió dos capturas en contra de Plummer, la última en cuarta oportunidad que terminó en fumble que recuperó Pittsburgh en la yarda 17 de Broncos.
Esto fue el fin de Denver, pues Roethlisberger clavó la estocada final con acarreo personal de tres yardas en una jugada de engaño por el lado izquierdo para ingresar a la zona de anotación (34-17) y conseguir su boleto al Súper Tazón.