BAJO LA LUPA
La crisis iraní y el "corredor petrolero"
Spengler -seudónimo de un editorialista del Asia Times, que se publica en Hong Kong, y de tendencia anglófila neoliberal- afirma que "Occidente atacará a Irán" (24/1/06). Más allá de su epílogo determinista, lo interesante se centra en su exposición del "corredor petrolero" que envuelve lo que hemos denominado el "triángulo superestratégico" del mar Negro-mar Caspio-golfo Pérsico, que experimenta peligrosas erupciones geopolíticas en su seno y en todo su perímetro.
LA RELEVANCIA GEOESTRATEGICA de Irán subyace en que posee fronteras con dos de los vértices y vórtices del "triángulo superestratégico" que forma parte del "corredor petrolero" de Spengler. ¿No fue, acaso, Kissinger quien depuso al Sha, su aliado exclusivo, para elevar deliberadamente el precio del petróleo?
SPENGLER REALIZA UNA pregunta sobre un acto que había enmudecido a los geopolitólogos: "¿por qué el presidente Jacques Chirac amenazó la semana pasada con emplear armas no-convencionales contra estados terroristas?", a la que sigue otra pregunta impertinente: "¿por qué Irán anunció que cambiaría sus reservas foráneas de los bancos europeos (amenaza de la que luego se retractó)?"
SU RESPUESTA RADICA en la "naturaleza de las ambiciones nucleares iraníes. Irán necesita armas nucleares, creo, no para atacar a Israel, sino para sostener una expansión imperial por medios convencionales militares".
DESDE NUESTRA PERSPECTIVA, el retiro de las reservas de los bancos europeos es preventiva y reactiva. Con la experiencia del embargo de los activos iraníes en los bancos de EU, la postura estricta de la troika de la Unión Europea (Gran Bretaña, Francia y Alemania) orilló a que la teocracia iraní haya amagado con refugiarse en las arcas asiáticas menos hostiles.
NO CUADRA QUE Irán retire sus reservas de Europa en el momento que pretende cambiar los petrodólares por petroeuros en marzo, cuando arranca su nueva bolsa para competir con el duopolio petrolero anglosajón de Nueva York y Londres.
A NUESTRO JUICIO, el intempestivo alarde nuclear de Chirac es probable que traduzca la proclividad estratégica de Francia por el sunnismo árabe -su frontera mediterránea en todo Africa del norte (con la excepción marginal tanto del Hezbolá chiíta en Líbano como de su aliada, la secta de los alawitas de Siria, en la parte oriental del mare nostrum)-, en detrimento del chiísmo más distante; además de la presunta alianza de los chiítas iraníes con los jihadistas argelinos (presuntamente manipulados por la dupla CIA/Bin Laden), en quienes no pocos estrategas galos detectaron la "mano invisible" de los disturbios piromaniacos en los suburbios parisinos.
SPENGLER OPINA QUE las "exportaciones petroleras de Irán se agotarán en 20 años, justo en el punto de inflexión demográfico cuando los costos de mantener una población envejecida aplastará sus finanzas (...) Afuera de las actuales fronteras yacen los recursos petroleros de Irak, Azerbaiyán y Turkmenistán (nota: tres de sus delicadas ocho fronteras), y no muy lejos se encuentran las reservas petroleras del este de Arabia Saudita". Los vecinos de Irán "se encuentran tan alarmados como Washington sobre el prospecto de un Irán con armas nucleares, y en privado (sic) están felices (¡sic!) de que EU borre tal capacidad". Comenta que "ha emergido en forma remarcable un consenso internacional para el uso eventual de la fuerza contra Irán". Y elucida que la amenaza nuclear de Chirac era una "advertencia contra Irán".
A DIFERENCIA DE IRAK, alega que la transformación europea respecto a Irán se debe al petróleo. Pero también Irak posee pletóricas reservas de "oro negro". So what?
A SU JUICIO, "Arabia Saudita y los Emiratos Arabes Unidos serían quienes más perderían con Irán equipada con armas nucleares", que estaría "lista para apoyar a sus correligionarios chiítas, que forman la mayoría en la parte oriental de Arabia Saudita productora de petróleo". ¿Nada más por el hecho de que exista 8 por ciento de chiítas árabes en los principales yacimientos petroleros del reino wahabita va a invadir Irán?
HASTA AHORA LOS ESTRATEGAS anglosajones han inflado demasiado lo que denominamos el chiste del chiistán y hay que ser precavidos con las lealtades de los chiítas árabes (de raza semita), quienes no necesariamente segui-rían los dictados de sus correligionarios persas (de raza aria). En la guerra de Irak e Irán de la década de los ochentas, los chiítas árabes se unieron a sus hermanos raciales sunnitas contra los chiítas iraníes. Si Arabia Saudita pudo existir hasta ahora con más de 200 bombas atómicas de Israel, ¿por qué no requilibrar la asimetría regional con una posesión similar de Irán?
SPENGLER PECA DE huntingtoniano y vaticina la muy cantada "guerra civil en Irak": en tales "condiciones de caos, Irán tendrá el pretexto de expandir su presencia sustancial" e "intervenir militarmente a favor de sus correligionarios chiítas".
VIENE EL TERCER FOCO: "Con armas nucleares, Irán reavivaría los reclamos persas sobre el sur de Azerbaiyán" y "continúa a reclamar parte de los recursos energéticos del mar Caspio con base en los tratados sovieto-iraníes de 1921 y 1940". Las relaciones con Irán son cordiales y Azerbaiyán "apoya el programa nuclear iraní", pero "conforme mengüe la producción petrolera de Irán en las próximas dos décadas, es muy probable que resurjan sus reclamos históricos sobre el mar Caspio".
ARREMETE CONTRA LA "inclinación apocalíptica" del presidente iraní Ahmadinejad y pronostica que el "prospecto de Irán es sombrío (sic). En una generación enfrentará un declive demográfico, colapso (sic) económico y desarraigo (sic) cultural". Entonces, ¿para qué aniquilarlo si se está carcomiendo solo? El "inherente problema insoluble (sic)" de Irán obliga a que "Ahmadin-Nejad prosiga una política imperial racional, aunque sea repugnante". Desde hace 2 mil 565 años, Persia ha proseguido una política irredentista. ¿Cual es la novedad?
ASEGURA QUE DEBIDO al "amplio arsenal de armas nucleares de Israel, así como a su capacidad termonuclear (sic), es altamente improbable que Irán ataque al Estado judío, al menos que lo adosen al muro. Enfrentada a la ruina y al asedio, la república islámica es totalmente capaz de desencadenar una conducta destructiva y suicida no sólo contra Israel, sino contra otros antagonistas" (v.g Francia). Aquí ya entramos a una nueva especialidad inventada por Spengler: la siquiatría geopolítica, quien no oculta su sinofobia: "de lejos (sic) el mayor perdedor en la confrontación de Irán con Occidente será China (...), el país menos eficiente en uso de energía. Precios altos de petróleo dañarán su economía más que a nadie". ¡Qué exagerado! Pierde la compostura para acabar despreciando la postura china que "no cuenta" (¡sic!) frente al "resto de la comunidad internacional". En forma más juiciosa, habría que evaluar tanto la mediación rusa, que puede resolver la crisis, así como el prudente abordaje chino.
CONCLUYE QUE "EMPEZO el tercer acto de la tragedia que dio inicio el 11 de septiembre" y "Bush no tiene otra opción" que bombardear Irán, "salvo dejar a un aguafiestas suelto en el corredor petrolero".
SE SALTO A TURKMENISTAN, potencia gasera y frontera con Irán, que a su vez posee la segunda reserva más importante de gas del mundo, lo cual le puede aliviar sus calamidades futuras.
LA GUERRA SICOLOGICO- desinformativa bate en pleno: el grupo opositor iraní Fundación para la Democracia en Irán, apadrinada por EU, asegura que el 20 de marzo, fecha de la primavera persa (el Nouruz), Irán realizará su primera prueba nuclear (Debka, 22/1/06)- ocho días antes de las elecciones de Israel, lo cual podría favorecer al superracista Bibi Netanyahu, íntimo de los neomoabitas veneradores del Moloch bélico, es decir, los neoconservadores straussianos que controlan la Casa Blanca.
AL UNISONO DE LA toxicidad del neoconservador John Bolton, embajador clandestino de Bush en la ONU (aún no ratificado por el Senado), ciertos actos ultrajantes de Ahmadinejad favorecen a los radicales de Israel y a los círculos del añejo Irán-contras: la triangulación mafiosa de armas por cocaína de Reagan y Daddy Bush con Israel y la teocracia jomeinista iraní. ¿Resucitaron al Irán-contras tras las bambalinas de Irak? Esta pregunta no la exploró Spengler.