Amenaza Israel con retener impuestos y aranceles que recolecta para la ANP
Abbas, dispuesto a negociar con Hamas una coalición gobernante
Mil activistas de Fatah queman autos, exigen la renuncia de sus dirigentes y rechazan coaligarse
Predice político palestino que el grupo armado suavizará su postura cuando ingrese al gobierno
Ciudad de Gaza, 27 de enero. Mahmoud Abbas, presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), viajará a Gaza próximamente para iniciar pláticas con el liderazgo de Hamas y negociar la formación de un gobierno de "unidad nacional" que incluiría a ministros del derrotado movimiento Fatah.
Abbas abrió la posibilidad de contactos con Hamas antes de que mil activistas de Fatah, incluyendo a unos 100 hombres armados, quemaran autos esta noche, cuando protagonizaron una desenfrenada manifestación ante el edificio del Consejo Legislativo, para exigir la renuncia de los principales líderes del movimiento y rechazaron una coalición con Hamas.
Esto ocurrió luego de que un político de alto nivel que sirve de nexo entre Hamas y el presidente palestino predijo que el grupo armado islámico "trataría de reconstruir sus puentes políticos con la comunidad internacional" para evitar que se cumplan las amenazas de Estados Unidos y la Unión Europea de suspender sus donativos económicos a la ANP si Hamas ingresa al gabinete.
Tel Aviv añadió hoy sus propias amenazas cuando Yossi Bachar, director ejecutivo del Ministerio de Finanzas israelí, sugirió que podrían ser retenidos impuestos y aranceles de los palestinos, que dicha dependencia recolecta.
El cónsul general de Estados Unidos en Jerusalén, Jacob Walles, amenazó también con cortar los fondos -que normalmente se destinan a ministerios de la ANP- al nuevo gobierno si la organización se niega a renunciar a la violencia.
Bachar afirmó ante el Foro Económico de Davos: "Enfrentaremos el problema práctico que implica tratar con gente que llama a la destrucción de Israel. Si quieren seguir trabajando con nosotros, tendrán que encontrar una solución, de otra forma no sé cómo van a obtener dinero".
La presión para que Hamas renuncie a su meta de buscar la destrucción de Israel se incrementó cuando Amr Moussa, secretario general de la Liga Arabe, dijo que la facción tendrá que aceptar la inicativa firmada en Beirut en 2002, que exige pleno reconocimiento del Estado israelí por los árabes a cambio de que se retire de los territorios ocupados desde la Guerra de los Seis Días, en 1967.
La manifestación en la ciudad de Gaza denota tanto la urgencia como la dificultad de la tarea que enfrentará Abbas cuando trate de convencer a Fatah de unirse a una coalición. Esta fue sólo una de varias protestas luego de la dolorosa derrota de ese movimiento en las elecciones del miércoles.
Samir Mashrawi, uno de los principales candidatos de Fatah en Gaza, quien también perdió en las elecciones, afirmó durante la manifestación ante el Legislativo: "Esta protesta es reacción natural de los simpatizantes y miembros de Fatah. Tenemos una exigencia, que el comité central (del movimiento) y el Consejo Revolucionario renuncien inmediatamente".
Si bien Hamas se abstuvo de hacer celebraciones públicas por la victoria este viernes, testigos declararon que nueve personas resultaron heridas durante un tiroteo entre las dos facciones en la sureña ciudad de Jan Yunes después de que miles de simpatizantes del grupo armado, ondeando banderas verdes, festejaron en el campo de refugiados del pueblo.
En Ramallah, Abbas dijo a los periodistas: "Estamos haciendo consultas y en contacto con todos los grupos palestinos; definitivamente, cuando llegue el momento adecuado, el partido más grande formará el gabinete". Los dirigentes de Hamas, por su parte, afirmaron que quieren reunirse con Abbas esta semana para discutir la formación de un nuevo gobierno.
Ziad Abu Amr, importante político independiente de Gaza, quien fue electo para el Consejo Legislativo con el apoyo de Hamas, se entrevistó hoy con esta facción y con Abbas, y dijo haberlos instado a llegar a pronto acuerdo sobre la formación del gobierno.
Predijo, además, que Hamas preferirá claramente un gobierno palestino "de unidad nacional" que incluiría, probablemente, a Fatah y a miembros independientes.
Tras reconocer que muchos al interior de Fatah se oponen a una coalición así porque se sienten "amargados" por la derrota, a 46 años de haber sido fundada, Abu Amr agregó: "Se trata de una minoría de 43 de los 231 escaños parlamentarios. Esta es una nueva realidad política que tanto Fatah como Hamas deben enfrentar".
Mantener el cese del fuego
El doctor Abu Amr se cuidó de no sugerir que Hamas declarará de un momento a otro su reconocimiento a Israel, lo que los líderes internacionales han exigido como condición para aceptar la presencia de Hamas en la ANP.
Sin embargo, sí se aventuró a señalar que la facción armada podría comprometerse a prolongar indefinidamente el cese del fuego y prometer que discutirá esos asuntos cuando se llegue a acuerdo con Israel que apunte a la formación de un Estado palestino.
También sugirió que Hamas podría estar en posición de hacer respetar un cese del fuego de manera más efectiva de lo que lo hizo la ANP, y de lograr que lo acepten grupos que anteriormente lo ignoraron, como Jihad Islámica.
"Si ellos están en control, entonces será su mandato; deberán preservar la ley y el orden. Si como grupo adoptaron la decisión política de respetar un cese del fuego, como gobierno estarán mucho más decididos a acatarlo para así establecer su autoridad nacional", agregó Abu Amr.
Fuentes políticas palestinas señalaron este viernes que pese a que el enorme triunfo de Hamas ha debilitado a Abbas, quien está comprometido a negociar la fórmula de dos estados para solucionar el conflicto con Israel, está aún en posición de hacer algunas demandas en las negociaciones porque existe la amenaza implícita de que renuncie.
Lo anterior traería consecuencias desestabilizadoras que Hamas tratará de evitar con tanto ahínco como Estados Unidos e Israel.
© The Independent
Traducción: Gabriela Fonseca