Los más pobres buscan respuestas, reconoce en Bolivia
No preocupa al Banco Mundial el modelo de izquierda en AL
La Paz, 29 de enero. Al Banco Mundial no le preocupa la tendencia hacia un ''modelo de izquierda'' que se viene imponiendo en América Latina, en la que se inscribe el gobierno de Evo Morales en Bolivia, y ve estas perspectivas ''con mucha esperanza'', informó hoy la prensa boliviana citando voceros del organismo multilateral.
''Los cambios políticos que vive América Latina nos están mostrando que los más excluídos, los más pobres y marginados, están buscando respuestas más consecuentes de parte de sus Estados en la lucha contra la pobreza'', señalaron directivos del BM al responder un cuestionario publicado hoy por el rotativo La Prensa, de La Paz.
Indicaron que ''el Banco Mundial ve estas perspectivas con mucha esperanza'', y anticiparon que ''estarán cooperando en la medida de sus posibilidades'' a alcanzar los objetivos propuestos.
''Los esquemas económicos que están siendo revisados sirvieron, en gran medida, para atraer inversiones y generar riqueza. Sin embargo, no lograron distribuir mejor los beneficios entre la población más necesitada'', admiten.
A su parecer, ''los nuevos vientos están empujando hacia la izquierda, y eso significa que habrá más énfasis en la distribución más justa de las oportunidades, los activos y la riqueza.
''Eso es positivo, pero no hay que olvidar que esta distribución debe ser ordenada, y que no ponga en riesgo la estabilidad económica que es un patrimonio de todos los bolivianos. Como se mencionó anteriormente, una vía efectiva y positiva para todos es promover un crecimiento inclusivo'', advierten, al aludir al caso de Bolivia.
Sobre el país andino, destacaron que ''a pesar de los conflictos políticos y sociales de los últimos años, su economía entró en una senda de prometedora recuperación, impulsada por un entorno externo favorable y un aumento de las ganancias por las exportaciones de gas''.
Juzgan importante que se empleen los ingresos del gas ''para reducir la pobreza, fortalecer y expandir la productividad y así edificar una economía inclusiva y sostenible'', que permita dejar atrás la histórica dependencia ''de determinados recursos naturales''.
Proponen, además, que se mejore ''el ambiente de negocios'' para hacer de Bolivia un país más competitivo y se definan ''reglas claras y estables'' para impulsar la inversión privada nacional y extranjera.