Militantes de la organización los demandaron ante la procuraduria y la CDH de Hidalgo
Acusan a dirigentes de Antorcha Campesina por amenazas de secuestro
Si nos retiramos del plantón en Pachuca plagiarán a nuestros familiares, dicen los quejosos
Ampliar la imagen Aspecto del plantón que integrantes de Antorcha Campesina mantienen frente al palacio de gobierno, en Pachuca Foto: Antonio Loaiza
Pachuca, Hgo. 30 de enero. Militantes de la organización Antorcha Campesina denunciaron ante la Procuraduría General de Justicia estatal y la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Hidalgo (CDHEH) que dirigentes de esa agrupación los amenazaron con secuestrar a sus familiares si no se mantienen en el plantón que desde hace casi seis meses se instaló frente al palacio de gobierno en demanda de una serie de obras por un monto de 25 millones de pesos.
En el documento enviado a la CDHEH los quejosos señalan directamente a los dirigentes de Antorcha Campesina Guadalupe Orona Urías, Adauta Mota Alvarez, Cristina Rojas Illescas, Martha García Veloz y Joaquín Gamboa de ser quienes, durante una incursión a las colonias Condesa y Europa -en compañía de otros militantes de dicha organización-, causaron destrozos y amenazaron con destruir las viviendas y secuestrar a los hijos de quienes se nieguen a mantenerse en "el movimiento".
Los denunciantes relatan que pretendieron salirse de la organización y sumarse a otra denominada Asociación Civil Belisario Domínguez, que a su vez es acusada por dirigentes de Antorcha Campesina de ser una agrupación subsidiada por el gobierno para desarticular su movimiento de lucha.
Desde hace ocho años -relatan- fueron convencidos de sumarse a la agrupación a cambio de unos lotes para construir sus casas. Sin embargo, hasta la fecha no les han entregado escrituras y son obligados a asistir a reuniones semanales, a comprar boletos para rifas "fantasmas" de terrenos y camionetas; hacer marchas y participar en el plantón permanente frente al palacio de gobierno. Quien no cumpla debe pagar 50 pesos; quien no tenga, tiene que "botear" -pedir dinero a transeúntes y automovilistas-, además de hacer guardias nocturnas.
Las amenazas incluyen quitarles los servicios de luz y agua o, en su caso, ser desalojados de sus viviendas (ya hay varias denuncias por el delito de despojo), pero "como no tenemos escrituras, tenemos que hacer lo que nos ordenan".
El 26 de enero, un grupo de antorchistas con el rostro cubierto, encabezados por Adauta Mota Alvarez, entraron a las casas de las colonias Condesa y Europa, ubicadas en la periferia de Pachuca, y amenazaron a sus moradores con secuestrar a niños y mujeres si siguen haciendo denuncias en su contra.
A su vez, Guadalupe Orona la ha emprendido contra las autoridades gubernamentales, a las que atribuye las notas periodísticas en su contra, y sostiene que la agrupación Belisario Domínguez es subsidiada por el gobierno para desacreditar su movimiento.