LOS DE ABAJO
Historial de agravios
MUCHO ES EL miedo de los de arriba por la rebelión que despierta la otra campaña impulsada por los de abajo. La medida de su temor es la de la represión que están llevando a cabo. No saben los poderosos responder de otra manera a los reclamos de cientos de miles de personas agraviadas. La persecución y las amenazas son, y siempre han sido, su única salida.
La otra campaña inició su recorrido hace apenas un mes y 10 días. Se ha encontrado con un interminable historial de agravios cometidos desde el poder contra los hombres y mujeres de abajo. La ruta del subcomandante Marcos, lo relatan día con día las páginas alternativas y el periodista Herman Bellinghausen en este diario, es la de la injusticia y la desigualdad que atraviesa el México profundo.
Los de abajo dicen su palabra y se organizan con esa invisibilidad que los hace fuertes. A sus justos reclamos, los gobiernos (federal, estatales y municipales) contestan como si siguieran un manual de la represión. Son, hasta eso, bastante predecibles.
Los reportes más recientes son elocuentes: integrantes del Movimiento de Artesanos Indígenas Zapatistas, en el Distrito Federal, conformado por indígenas triques que luchan por una vivienda digna, fueron detenidos y agredidos físicamente por el agrupamiento de granaderos capitalino, cuando ejercían su derecho a manifestarse pacíficamente. En el acto fueron detenidos 16 hombres y mujeres.
En Oaxaca, entidad con experiencia histórica en actos represivos y en la que por estos días se encuentra el delegado Zero, el Comité por la Defensa de los Derechos Indígenas, integrante de la Alianza Magonista Zapatista y de la Coordinadora Oaxaqueña Magonista Popular Antineoliberal, denunció la detención de miembros de su organización por el grave delito de pegar carteles y colocar una manta de información sobre la otra campaña.
En Puebla, próxima parada del primer delegado zapatista que recorre el país impulsando otra manera de hacer política, se registró un violento desalojo de comerciantes que suscriben la Sexta declaración de la selva Lacandona. El saldo de los gases lacrimógenos, las pedradas, los golpes y los petardos fue de 27 heridos, ocho con fractura craneal, además de la detención del dirigente de la organización de comerciantes de la sierra norte poblana.
Otra más en el DF: en la delegación Azcapotzalco el profesor Cuauhtémoc Padilla y su hija, activistas políticos e impulsores de la otra, fueron agredidos y desalojados mientras realizaban trabajo informativo y distribuían publicaciones.
En el estado de Hidalgo, Marco Antonio Ibarra, del colectivo Pachamama, quien difunde la Sexta declaración en su barrio, fue víctima de vigilancia policiaca frente a su casa durante una semana. En ese estado, un adherente del Colectivo Ingobernables de Pachuca fue amenazado de muerte vía telefónica.
Lo ocurre en otros estados de este México de abajo en el que, sin embargo o precisamente por eso, la otra va...