Demanda México detener obras en canal fronterizo
El revestimiento del canal Todo Americano no debe comenzar sin que antes se realice un estudio de impacto ambiental transfronterizo. Si se ignora este requisito se "estaría violando el Acuerdo de Seguridad y Prosperidad para América del Norte (ASPAN), el cual fue ratificado por los presidentes de Estados Unidos y México el año pasado", subrayó José Luis Luege Tamargo, titular de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
Según el funcionario, en abril las autoridades estadunidenses prevén comenzar la obra, la cual tendrá un "gran impacto ambiental del lado mexicano, pues impedirá la filtración de 85 millones de metros cúbicos por año del líquido hacia México", lamentó Luege.
La Semarnat solicitó al canciller Luis Ernesto Derbez que "agote la vía diplomática" antes de intentar cualquier acción en tribunales.
Entrevistado durante la reunión de la Asociación Nacional de Autoridades Ambientales Estatales, el secretario puntualizó que el ASPAN señala claramente que "cualquier obra transfronteriza requiere el análisis de impacto ambiental a ambos lados de la frontera", no sólo del lado que emprende la obra, como el caso de Estados Unidos.
Acotó que durante las conversaciones con autoridades estadunidenses, la Semarnat ha "enviado varios documentos al Departamento del Interior" y que inclusive se han realizado reuniones con funcionarios de la Agencia de Protección Ambiental (EPA por sus siglas en inglés) de eses país.
Aunque de acuerdo con organizaciones ambientales lo que Estados Unidos pretende al revestir con cemento el canal es recuperar 233 millones de metros cúbicos de agua que cada año se filtran al suelo mexicano e irrigan acuíferos, humedales y el delta del río Colorado, para la Semarnat la cifra correcta es sólo 85 millones.