El modelo fue ideado por científicos del Centro de Investigaciones en Energía
Desarrolla la UNAM un prototipo que produce hielo a partir del sol
El principio del "refrigerador solar" tiene sustento en la condensación del amoniaco
Sus creadores aseguran que no daña la capa de ozono ni influye en el calentamiento global
Ampliar la imagen
Claudio Estrada García, director del Centro de Investigaciones en Energía, en la entrevista con este diario
Ampliar la imagen
Páneles solares fotovoltaicos del centro universitario, ubicado en Temixco, Morelos. De acuerdo con los científicos, cada refrigerador solar producirá 10 kilogramos de hielo cada día
Foto: José Carlo González
Temixco, Mor. ¿Hacer hielo con el Sol? ¿No es acaso un contrasentido? No. Al menos para los científicos del Centro de Investigaciones en Energía, de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), quienes han desarrollado un prototipo de refrigerador solar que utiliza la fuente calorífica para crear un sistema de enfriamiento que, efectivamente, produce hielo.
Otra aplicación del calor del Sol como fuente de energía renovable es la estufa solar, que utiliza el principio contrario.
La especialidad del Centro de Investigaciones en Energía es buscar opciones alternas al consumo de hidrocarburos.
En la coordinación de refrigeración y bombas de calor, del departamento de sistemas energéticos, los investigadores Wilfrido Rivera Gómez-Franco y Carlos Octavio Rivera Blanco desarrollan sistemas de energía térmica que pueden hacer hielo del Sol. Inclusive trabajan en el aplicación de sistemas de aire acondicionado a partir de la energía solar.
Aunque parezca historia de ciencia ficción, esta coordinación -a cargo de Roberto Best y Brown- desarrolla el refrigerador que aprovecha la energía térmica del Sol para producir hielo.
El prototipo está pensado para utilizarse en lugares que carecen de energía eléctrica, y en principio sería útil para conservar medicinas o alimentos.
Temixco fue elegido entre otros lugares de la República -Hermosillo, Mexicali y La Paz- para instalar el centro, debido a que resulta ser mejor sitio para aprovechar los rayos solares, indica su director, Claudio Estrada Gasca.
Mecánica del prototipo
El prototipo utiliza como refrigerante el amoniaco, porque presenta ventajas termodinámicas y termofísicas. Sin embargo, lo más importante para la filosofía de este centro universitario es que no destruye la capa de ozono, no genera gases de efecto invernadero ni influye en el calentamiento global.
La mecánica es la siguiente: la energía solar separa el refrigerante de una mezcla líquida formada por nitrato de litio, utilizada como absorbente del amoniaco. Los investigadores descubrieron en estudios previos la ventajas de esta sustancia sobre el absorbente tradicional del amoniaco (el agua): la temperatura de operación del concentrador solar.
Roberto Best y Brown explicó que el sistema de refrigeración es intermitente, y que consta de dos etapas. En la primera se llevan a cabo los procesos de generación y condensación, y en la segunda los de evaporación y absorción.
En la primera se calienta una solución de litio-amoniaco dentro de la tubería colocada en el concentrador solar. Allí la sal tiene la propiedad de absorber el amoniaco y mezclarse con él.
Al llegar a una temperatura de entre 75 y 110 grados centígrados, el amoniaco se evapora y se libera de la solución; va luego al condensador, donde pasa de fase pura a la fase líquida para almacenarse en un tanque diseñado para ese fin.
En la segunda etapa el amoniaco líquido pasa a través de una válvula de expansión, lo que permite una brusca disminución de la presión a la que se encontraba en el tanque. De allí pasa al evaporador, que se encuentra dentro de la cámara frigorífica, donde absorbe el calor presente, congelando el agua colocada dentro de la cámara.
En este momento el refrigerante se encuentra en forma de vapor, y por la misma tubería es absorbido dentro de la solución, completándose así el ciclo.
El prototipo fue diseñado para zonas donde se carece de energía eléctrica, es decir, zonas rurales, costas o montañas
De acuerdo con los científicos, el modelo es una alternativa para desarrollar sistemas de refrigeración en pequeña escala.
En cuanto a su tamaño, añaden que fue pensado para trasladarlo fácilmente en una camioneta de caja abierta. El objetivo inmediato es que produzca 10 kilogramos de hielo cada día. Su patente está en trámite.