Ofrecen lectura de Tarumba, de Jaime Sabines, en lenguas autóctonas en la FILPM
Escritores indígenas buscan nuevas formas de expresión literaria, señalan
La traducción de textos escritos en español realizada por los propios indígenas a su lengua originaria es "una experiencia muy reciente, que cada día cobra más importancia".
Hoy, los autores en lenguas originarias, particularmente las habladas en Chiapas y Oaxaca, "no sólo escriben la tradición oral de los pueblos, sino que impulsan una literatura india actual, que puede verse en el surgimiento de nuevos escritores y narradores, quienes no únicamente se basan en la cosmovisión y las herramientas propias de sus idiomas, sino también se refuerzan con las técnicas literarias universales".
Esa búsqueda no sólo queda en la creación en lengua propia, sino que su exploración y campo de trabajo llega también a la traducción de textos -particularmente literarios- escritos en español, expresó el escritor tzotzil Enrique Pérez López, quien junto con los creadores tzeltal y chol, Nicolás López Arcos y Marcial Méndez Pérez, respectivamente, leyó algunos fragmentos traducidos a su propia lengua del poema Tarumba, de Jaime Sabines, como una manera de celebrar el 80 aniversario de nacimiento del poeta mayor de Chiapas.
En el acto, que se realizó este domingo en el contexto de la 27 Feria Internacional del Libro del Palacio de Minería (FILPM), con la participación de un trío de música tradicional de San Juan Chamula, los traductores explicaron que su trabajo implicó enfrentarse a una serie de problemas, "no sólo conceptuales, sino literarios, ya que si bien las lenguas originarias son ricas en metáforas, traducir el poema es enfrentarse también al conocimiento adecuado de la lengua (español) y la cultura en que fue concebido".
Traducir textos de otros idiomas a las lenguas originarias, en los que se tienen que incluir los textos técnicos y científicos, "es hacer posible la interculturalidad", destacó Enrique Pérez. "En la medida en que los pueblos accedan al conocimiento en sus propios idiomas, habrá una mayor posibilidad de reflexión y de reconstrucción de las capacidades creativas de las comunidades".
Lo que proponemos, añadió Pérez López en entrevista, "no es una traducción como necesidad sólo de los pueblos indios, sino como una necesidad de ambos.
"El trabajo de traducción forma igual parte de ciertos preceptos jurídicos que tienen que ver con los derechos lingüísticos; por ello es que ahora hablamos de una profesionalización de la traducción en lenguas indígenas.
"Como cualquier otro traductor, se tiene que reconocer y proteger su trabajo, y hacía allá vamos", dice el también escritor tzotzil.
En la actualidad "se tiene una asociación denominada Oxlajunti', que se podría traducir como: 13 voces o 13 palabras o 13 frases. Esta asociación por el momento agrupa a traductores en lenguas tzeltal, tzotzil, chol, tojolabal, zoque y mam. "Nuestra experiencia partió de la traducción de los acuerdos de San Andrés, y desde ese momento hemos buscado una mayor profesionalización".