Recibió el Premio Xavier Villaurrutia 2005 en el Palacio de Bellas Artes

David Huerta pide al Gobierno del DF no escatimar recursos para la cultura

Llamado del escritor a Encinas para impedir recorte presupuestal a la Casa del Poeta

CARLOS PAUL

La noche del pasado lunes, el poeta David Huerta recibió el Premio Xavier Villaurrutia de Escritores para Escritores 2005, en la sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes, por el conjunto de su obra poética y en especial por su poemario Versiones, escrito en 1977 y reditado en 2005.

En la ceremonia, con un recinto abarrotado de amigos, colegas y alumnos, el poeta aprovechó la ocasión para hacer un llamado al Gobierno del Distrito Federal (GDF) para que no se lleve a cabo el recorte de 12 por ciento al presupuesto con el que se apoya a la Casa del Poeta.

Luego de evocar la figura de Villaurrutia y algunos de sus versos que podrían definir lo que es la poesía, Huerta recordó que dicho inmueble fue rescatado de la demolición por Carlos Pellicer, discípulo de Ramón López Velarde, nombre que hoy ostenta la Casa del Poeta.

Dicho espacio, apuntó Huerta, ''es propiedad del gobierno de la ciudad y constituye una institución de asistencia privada, y no hay nada en las leyes que obligue a las autoridades de la ciudad a subsidiarlo, pero quienes formamos parte de la Casa del Poeta no queremos que los recortes presupuestales del gobierno, que ponen en peligro su subsistencia, nos orillen a buscar apoyo en la iniciativa privada para que la casa siga funcionando'.'

Lugar entrañable y lleno de vitalidad

''El gobierno metropolitano -prosiguió Huerta- tiene la obligación moral e histórica de ayudarla. No hay razón -aparte de la mezquindad burocrática- para que los dineros que aporta disminuyan, como ha sucedido en los años recientes. Un gobierno de izquierda está obligado a no forzar la privatización completa de un centro de cultura como éste. Apelo al buen juicio y disposición de Alejandro Encinas para ampliar y enriquecer las tareas de la Casa del Poeta Ramón López Velarde.

''Carlos Pellicer, José Gorostiza, Efraín Huerta, Jaime Sabines, Salvador Novo, Octavio Paz, entre muchos otros nombres de primera línea de la literatura mexicana se lo agradecerían como un acto de justicia y sensatez, para no hablar de los lectores de poemas y de los poetas vivos y activos que la quieren y la consideran un lugar lleno de vitalidad, entrañable, hermoso y útil."

En el acto participaron Saúl Juárez, Alicia Zendejas, Alí Chumacero, Ignacio Solares, Silvia Molina y Luis Vicente de Aguinaga, quienes para celebrar el galardón reflexionaron sobre la trayectoria y poética de David Huerta, destacando entre otras cosas, que la vocación del autor de Jardín de la luz e Incurable, es al mismo tiempo "clásica y experimental".

Para concluir, y tras agradecer a la Sociedad Alfonsina, al Instituto Nacional de Bellas Artes, a la Universidad Autónoma de la Ciudad de México y a los integrantes del jurado por tal distinción, David Huerta habló sobre su anhelo de poder llegar algún día a escribir el poema.

''Por fatalidad, por elección personal, por gusto de las palabras y por amor a mis seres queridos vivos y muertos, quise escribir poesía, pero no he conseguido, todavía, escribir el poema.

''No sé si lo conseguiré. Aunque ese mismo hecho es lo que me anima a seguir no sólo escribiendo, sino leyendo, traduciendo y dando clases.

''Mientras tanto, recuerdo esta noche con infinito amor a mis muertos y los abrazo a todos ustedes, aquí presentes, con gratitud y emoción."