Asistentes tienen dificultades para obtener visas, acusan
El foro alternativo del agua enfrenta nuevos obstáculos
En Costa Rica, El Salvador y Argentina no hubo los problemas de aquí, subraya organizador del encuentro
El Tribunal Latinoamericano del Agua no sólo ha enfrentado problemas con la sede donde se desarrollarán las audiencias públicas, sino que también tiene dificultades con las visas de algunos de los asistentes, entre ellos están integrantes del jurado, señaló Javier Bogantes, director de esta instancia.
Ante la cancelación inesperada de la sede del Museo de Antropología por parte del director del recinto, Felipe Solís, quien esgrimió ''razones técnicas'' para no facilitar sus dos auditorios, ayer el tribunal decidió trasladar la audiencia pública al ex templo de Corpus Christi, frente a la Alameda.
Bogantes dijo que la cancelación de la sede original, que se había decidido desde octubre pasado, representa un enorme trastorno, ya que en sólo seis días se debe reorganizar todo el trabajo de preparación de la audiencia que desde hace seis meses había comenzado.
''Para el tribunal resulta extraño el argumento esgrimido por el director del museo, conociéndose la existencia de equipos que garantizan el suministro eléctrico al edificio, incluyendo la subestación que en caso de emergencia también puede atender la demanda'', expresó Bogantes.
Antes, expuso, el tribunal ha realizado audiencias en Costa Rica, El Salvador y Argentina, países en los que no ha enfrentado una situación como la de aquí. Se seleccionó México por la coyuntura de la realización en esta ciudad del cuarto Foro Mundial del Agua, precisó.
Aunque no quiso abundar en torno a los problemas de los asistentes para la obtención de visas, dijo que esperan solucionar esta situación en los próximos días, y que el jurado se dará a conocer hasta que las personas seleccionadas hayan llegado a la ciudad.
Bogantes se refirió a que los problemas de agua se derivan de la "crisis de legalidad, ya que las constituciones regulan el derecho a la salud y la vida, pero las normas y reglamentos no se cumplen, lo cual lleva a actos de impunidad".
El tribunal, recalcó, es una opción ética para dirimir los conflictos y busca hacer un llamado de conciencia sobre los derechos comunes.
Este organismo propone un nuevo escenario de justicia ante tantos problemas relacionadas con el agua sin solución que existen en América Latina; "la razón de existir del tribunal es que no hay una atención adecuada de los casos, y el funcionamiento de este tipo de tribunales implica una ampliación del concepto de democracia".
De los 13 casos que se analizarán, agregó, seis corresponden a México y varios de ellos son antiguos, lo cual demuestra lo difícil que es resolverlos, pues no han tenido solución por las vías habituales.
Bogantes rechazó haber recibido presiones en relación con los casos que se abordarán en las audiencias, aunque se trata de conflictos en los que tienen injerencia grupos poderosos. Es el caso del transporte de material nuclear por el Canal de Panamá, que va en contra del gobierno de ese país, aunque se trata de material japonés que se transporta por esa vía para ser llevado a Francia e Inglaterra, donde es procesado.
En los casos mexicanos, los demandados son Petróleos Mexicanos, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, la Comisión Federal de Electricidad, la Comisión Nacional del Agua, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente y la Secretaría de Salud. Ninguno de estos organismos ha respondido al requerimiento de información del tribunal.