Madrid, "preocupado"
Madrid, 10 de marzo. El gobierno del presidente español, el socialista José Luis Rodríguez Zapatero, expresó hoy su "preocupación" por la situación creada en Bolivia, a raíz del hallazgo del presunto delito de contrabando de petróleo protagonizado por la multinacional española Repsol-YPF.
La diplomacia española se puso en contacto con autoridades bolivianas para conocer los detalles de la orden de registro llevada a cabo ayer en Santa Cruz, en la sede de la filial de la gasera española, y sobre la situación judicial de sus dos ejecutivos, Julio Gavito y Pedro Sánchez, cuyo paradero se desconoce.
Las autoridades españolas han reaccionado con cautela ante la investigación abierta en Bolivia a la empresa Repsol por el contrabando de 230 mil barriles de petróleo, por un monto de unos 10 millones de dólares.
La vicepresidenta primera del gobierno español, María Teresa Fernández de la Vega, confesó su "preocupación", pero manifestó su "plena confianza" en que las autoridades bolivianas respetarán "la seguridad jurídica y la legalidad internacional".
Menos cautos se mostraron los responsables de la cancillería española. El secretario de Estado para Asuntos Exteriores, Bernardino León, sostuvo que "es una enorme preocupación para España, y espero que se pueda encontrar una solución y evite este halo de una actuación irregular por Repsol, que no nos parece justa".
León dijo que Repsol en Bolivia "realiza una gran labor, está comprometida con el presente y futuro del país y dispuesta a reforzar compromisos".
El ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Angel Moratinos, se puso al frente de las maniobras diplomáticas al solicitar información y datos a la embajada de Bolivia en España.
Hasta el momento, tanto las agrupaciones de empresarios como los medios de comunicación españoles se han mantenido a la espera de ver cómo se desarrollan los acontecimientos y conocer más detalles del presunto delito de la multinacional española. (Armando G. Tejeda, corresponsal)