El Correo Ilustrado
Sobre la extradición de ciudadanos vascos
Señora directora: Este 10 de marzo se juzgó al ciudadano vasco José Miguel Etxeandia Meabe en la sala tercera de lo penal de la Audiencia Nacional, en el Estado español. Etxeandia, de 45 años, fue detenido el 4 de julio de 2003 en México por policías mexicanos bajo el pretexto de no tener documentos migratorios vigentes y entregado en una extradición sumaria a la policía española. Las consecuencias de este acto ilegal, violatorio de las leyes mexicanas y los convenios internacionales firmados por México, son las siguientes:
1. Tras su entrega a la policía española fue sometido a un periodo de incomunicación de 10 días, durante los cuales fue torturado, como consta en el informe E/CN.4/2005/62/Add.1 del relator especial para la tortura de Naciones Unidas. Sin embargo, fue entregado a un juez al cuarto día, debido a que sufrió espasmos en medio de las torturas y sus torturadores pensaron que podía morir.
2. Durante los casi tres años siguientes, Miguel ha pasado por dos cárceles diferentes, ambas distantes por lo menos 500 kilómetros de su lugar de origen, separado de su familia y su pareja mexicana, esperando el juicio.
3. Miguel, quien padece hepatitis C y trastorno obsesivo compulsivo, ha sufrido complicaciones de salud (vértigos, pérdida de visión y depresión severa). Los médicos de la cárcel se niegan a atenderlo y a suministrarle los medicamentos necesarios.
4. Quince días antes del juicio, su abogado, Alfonso Zenón, fue notificado de que éste se llevaría a cabo. Esta actuación es ilegal, ya que la legislación española contempla que el aviso debe hacerse por lo menos 30 días antes. No obstante esto y su grave condición de salud, el juez de la sala penal tres, Alfonso Guevara, se negó a retrasar la vista.
5. Miguel podría ser condenado a 35 años de prisión con testimonios arrancados bajo tortura como única prueba.
El caso de Miguel Etxeandia no es excepcional; hechos similares han ocurrido con 26 ciudadanos vascos expulsados por México de la misma manera. A esto ha contribuido el gobierno mexicano, y lo seguirá haciendo si entrega a los seis vascos presos en el Reclusorio Norte y en el penal de Santa Marta. Hacemos un urgente llamado a las autoridades mexicanas para que se conduzcan con apego a la legalidad.
Emma Messeguer, amigos y familiares de José Miguel Etxeandia Meabe
Pide ayuda para ejercer crédito hipotecario
Señora directora: Por este medio me dirijo al presidente Vicente Fox para comentarle una situación. Estoy harta de ser parte de una estadística, pues como muchos mexicanos comúnmente lo he sido y ello no me ha dado ningún beneficio.
Después de 20 años de trabajar para el gobierno, resulta que fui una "afortunada" beneneficiaria con la adjudicación de un crédito hipotecario del Fovissste, y fue entonces que me di cuenta de que otra vez estoy a punto de ser una cifra estadística más.
El crédito me fue otorgado a finales de noviembre de 2005, pero estaba mal mi nombre. El 9 de diciembre pasado dirigí una carta al Fovissste, y el 27 de febrero anterior recibí mi carta de adjudicación con el nombre correcto. Sin embargo, me dieron hasta el próximo 30 de abril como plazo para ejercerlo, es decir, tengo escasamente dos meses y tres días para encontrar una casa y realizar los trámites necesarios.
A lo anterior quiero agregar que cuando ingresé mi crédito a una Sofol perdí dos días en trámites burocráticos: ir a determinada hora, acudir a las juntas de información que sólo se realizan los jueves a las 17 horas, que la dirección había cambiado (la nueva me quedaba de punta a punta).
Cuando al fin encontré una Sofol que no puso trabas, resulta que mi crédito "ya lo tenía asignado otra Sofol". Cuando pregunté qué empresa estaba a cargo, me dijeron que era el propio Fovissste, lo cual es un caso extraño, según me dijeron.
Tuve que perder otros tres días para que se me liberara el préstamo del Fovissste y lo atrajera la Sofol. Queriendo ganar tiempo, hago la pregunta clave: ¿cuánto es el monto con el que cuento?, y para mi sorpresa me dicen: 280 mil pesos.
Fue entonces cuando me di cuenta de que estaba siendo parte de la estadística, las del gobierno que se jacta de apoyar a con créditos hipotecarios.
Señor Presidente: usted nos dijo muchas veces, en un carísimo mensaje televisivo, que otorgó miles de créditos, y que por eso miles de familias tenían casa y vivían felices.
No dudo de que se hayan otorgado esos créditos, pero ¿cuántas de esas miles de personas realmente pudieron ejercerlos?, porque la realidad es que en el Distrito Federal, donde yo radico, no hay un pequeño departamento que cueste menos de 400 mil pesos, y eso en los barrios menos privilegiados.
Y le digo que soy estadística porque soy mujer, divorciada y madre soltera que ha sacado a sus hijas adelante, trabajando en dependencias oficiales, y ahora está a punto de ingresar a la lista de las "afortunadas beneficiarias" de un crédito que ni por tiempo ni por monto puede ejercer.
Me dirijo a usted porque ya no quiero ser estadística; tengo el derecho de ejercer mi crédito, quiero y debo hacerlo porque pago más de la mitad mi sueldo en renta. No encuentro una manera lógica de ir contra el tiempo. Solamente usted me puede dar una solución.
Minú A. Ramírez Felix
Se queja de precios de medicamentos
Señora directora: El costo de los medicamentos en México, fabricados por trasnacionales, es un atraco para los mexicanos, con el visto bueno de las secretarías de Salud y de Economía. Para muestra basta un botón.
La venta al público de una tableta de 100 miligramos de Viagra en Estados Unidos, con todos sus costos incluidos, es de 1.56 dólares. En pesos mexicanos (a 10.65 pesos por dólar) es de 16.614 pesos, pero aquí se vende al público en más de 100 pesos, además de que se niega terminantemente el descuento a las personas de la tercera edad.
Adjunto copia fotostática de los precios en Estados Unidos y la factura de venta en México.
Dr. Carlos Martín del Campo
Solicitan donadores
Señora directora: Agradeceremos infinitamente la publicación de la presente, dada la urgencia que tenemos de conseguir donadores de sangre para paciente con tipo O positivo, pero se nos indica que los donadores pueden ser de cualquier tipo.
Suplicamos a los voluntarios comunicarse al teléfono 5546-9834 con la señora Lidia Lugo o al 5566-4268 con Martín Ortega.
Lidia Lugo Torres