"¿A qué cambiar de estrategia, de rumbo?", pregunta
Llama el Presidente a elegir la continuidad
Confiesa que su cargo le ha dado ciertos conocimientos
Coatzacoalcos, Ver., 14 de marzo. Confiado en la decisión que tomará en julio una ciudadanía "atenta, informada y reflexiva", el presidente Vicente Fox preguntó: "¿A qué, entonces, cambiar de estrategia? ¿A qué cambiar de rumbo?" Si, por lo demás, agregó, ya se ha dicho que se mantendrán los programas de vivienda, Oportunidades, el Seguro Popular, Enciclomedia y las inversiones público-privadas.
"Ese es el camino del país y no debemos dar marcha atrás'', insistió el mandatario, cada vez más ubicado en su función de orientador de preferencias electorales hacia la causa de su partido, siempre a partir de la que considera exitosa gestión.
En una gira dedicada al tema de la energía, por lo que visitó una plataforma de exploración de hidrocarburos en aguas profundas del Golfo de México, Fox se hizo acompañar del líder del sindicato petrolero, Carlos Romero Deschamps, quien sigue bajo proceso judicial. Cuando se dedicó a promover la continuidad y "no cambiar de caballo", lo escuchaba la plana mayor de ese gremio.
Así, para persuadir a su auditorio -entre los que había también empresarios de la construcción y funcionarios locales y federales-, el mandatario fue más lejos. El país, dijo, ya salvó las pruebas que hoy ensayan "otros países sudamericanos" mediante nuevas fórmulas "para ver si salen de la situación actual".
En cambio, resaltó, México "ya ha pasado por todas, ha vivido prácticamente todos los esquemas y modelos económicos o macroeconómicos, distintas estrategias y políticas sociales, disciplina financiera y desorden. También ha pasado por intensas etapas de corrupción y otras en las que ha intentado comportamiento ético, de rendición de cuentas, honestidad y transparencia".
Subrayó el mandatario: "Por tanto, estamos en buena posición para evaluar y juzgar lo que tenemos por delante y lo que debe ser el camino de nuestro país. Tengo confianza plena en el pueblo de México, para que con las experiencias se tome en julio próximo una buena decisión".
Y recurrió a su experiencia de cinco años como Presidente: "me da ciertos conocimientos, he podido aprender qué funciona y qué no funciona; he podido darme cuenta dónde se logra el desarrollo y dónde se desperdicia el presupuesto".
Ese bagaje "no me lo puedo guardar, lo quiero compartir y pasar como información, simple y sencillamente como punto de vista para todos los mexicanos, porque tiene algún valor".
Fox asumió la comisión de errores, pero también de aciertos, los cuales ve en la manera como se trabaja, se lucha, se buscan caminos prósperos al desarrollo, y en la forma en que todos ponen su granito de arena, "su ladrillito para construir una gran nación".
Ese esfuerzo, prodigado lo mismo en las comunidades indígenas que en las aulas o en el arte, en la creación y todas las demás facetas de la vida, dio nuevo pie a Fox para llamar a cuidarlo y no echarlo por la borda. "Ya en el pasado estuvimos en arenas movedizas, cuando el esfuerzo individual servía poco más o menos que para nada", agregó.
Hoy, en cambio, aseguró, los mexicanos tienen una plataforma, un piso firme, de concreto, para hacer valer el esfuerzo lo mismo en un pequeño negocio que en la tarea colectiva, pues las bajas tasas de inflación y de interés dan confianza.
Y nuevamente su mensaje: "Eso es muy valioso, no lo perdamos".
Había dicho además que su gobierno no juega con el patrimonio de las familias ni de las empresas, que evita el camino falso "del crecimiento efímero" financiado con deuda. Por eso, si hoy se cosechan los frutos y hay crecimiento con estabilidad, "¿a qué entonces cambiar de estrategia?, ¿a qué entonces cambiar de caballo?" Lo mejor, sostuvo el mandatario, es fortalecer el presente y asegurar el futuro.
Tampoco le habían faltado motivos de satisfacción, sobre todo por las palabras del gobernador estatal, Fidel Herrera: "Vamos bien así, Presidente; sigamos con usted por el bien de México. Veracruz está presente al lado de su Presidente".