No tuvo el impacto que se esperaba

El excesivo afán de lucro en el cuarto Foro Mundial del Agua ha dejado sentir sus efectos: expositores que invirtieron cuantiosos recursos se quejan de que no hay gente, representantes de la sociedad civil decidieron no ingresar, porque deben pagar diariamente 122 dólares, y los salones de conferencias están semivacíos.

Representantes de las empresas organizadoras, Burson Marsteller y Krause, admitieron que el acto los sobrepasó. Así, las actividades que más gente atrajeron fueron la presentación de Danielle Mitterrand y de músicos y danzantes del reino Asante, de Ghana, Africa occidental. Es decir, de organizaciones no gubernamentales y promotores culturales.

La inversión de los expositores, pensando que iban a hacer buenos negocios, se ha ido desinflando, en parte porque el foro se realiza en un largo fin de semana, feriado en México, y porque de los 10 mil asistentes que supuestamente iban a acudir seguramente sólo la mitad se ha presentado.

También porque la entrada cuesta más de mil 300 pesos, lo que ha dejado fuera del negocio a los expositores más modestos, quienes esperan que este domingo sea el peor día y a partir del lunes gran parte de los visitantes se trasladarán a la sede de las reuniones ministeriales, en un hotel de la colonia Anzures.

En corto, miembros de las empresas organizadoras -Burson Marsteller en relaciones públicas y Krause en logística- consideraron que nuestro país no está preparado para reuniones de gran envergadura: los proveedores quedan mal, los voluntarios no han sido capacitados y los miembros del Estado Mayor Presidencial han emitido órdenes diferentes todos los días.

El interés por las presentaciones ha disminuido: mesas explicativas y foros temáticos han girado en torno de tópicos ya discutidos, y se carece de propuestas concretas que animen la discusión y el debate. No fue así en la presentación de Danielle Mitterrand, quien en el espacio de Francia en la exposición logró convocar a gran cantidad de personas interesadas en escuchar más la postura de organismos no gubernamentales que la retórica de gobiernos, instituciones financieras y empresas.

La foto se la llevó el espectáculo ofrecido por músicos de Ghana bajo el título Sankofa, que en lengua twi del reino de Asante significa "de regreso a las raíces", y que es el nombre de la agrupación musical, sustentada en los tambores y la danza.

José Galán, Matilde Pérez y Angélica Enciso