Piden ayuda para que el gobierno cancele la cuarta fase del sistema Cutzamala
Mazahuas denuncian "despojo" del agua ante tribunal latinoamericano
El actual modelo hidráulico propicia la mercantilización desmedida del líquido: especialista
Ampliar la imagen Mujeres mazahuas presentan su denuncia ante el TLA Foto: José Antonio López
De enaguas rojas, naranjas y blancas, viajan en burro durante horas y con sus niños a cuestas para sacar agua de la que llaman su presita. A un lado miran el sistema Cutzamala, en donde viaja su líquido, del que nada les toca, porque antes que abastecer a los mazahuas que viven en los alrededores, las autoridades prefieren que les llegue a los 20 millones de habitantes de la zona metropolitana de la ciudad de México que habitan a120 kilómetros de distancia.
Esta es la denuncia que presentó ayer el Movimiento Mazahua por la Defensa del Agua y los Derechos Humanos ante el Tribunal Latinoamericano del Agua (TLA), que con este caso terminó la serie de audiencias públicas para emitir el próximo lunes los veredictos de los 14 expedientes revisados.
Los mazahuas acusaron que el sistema Cutzamala que abastece de 16 mil litros de agua por segundo a la ciudad de México ha transformado sus valles, en el estado de México, en un páramo. "Acabó con nuestra flora y fauna y el río parece atole", contó frente al jurado Martha Flores, de San Felipe de Villa de Allende.
Hartos de que les sustraigan el agua que perteneció a sus ancestros y que defendieron sus abuelos cuando el gobierno expropió hace medio siglo sus tierras, los mazahuas exigieron un alto a este modelo hidráulico: "¡No estamos de acuerdo en que se extraiga ni una gota más!", exclamaron.
Los hombres, con cañas de azúcar en sus manos, y las mujeres, como si fueran flores, con sus vestidos de satín que se llevan 20 metros de encaje, acusaron que el gobierno les ha prometido agua potable, vivienda y empleo, pero nada de eso se ha cumplido.
Del 100 por ciento de sus viviendas, apenas 15 por ciento tiene agua y hay zonas como la del Sirián en donde ni una sola casa cuenta con el líquido. A cambio, sólo tienen un pozo de 60 litros al que tienen que llegar a las cinco de la madrugada para hacer una cola que les trae como recompensa sólo dos litros de agua.
Ahora la situación se agrava. La presita de donde sacan sus pescados, quelites y papas -comestibles que llevaron al jurado como muestra- está en riesgo porque la Comisión de Agua del estado de México "quiere potabilizar". Con esto, "se moriría todo lo que comemos", expresa preocupada Beatriz Juárez.
Esa presita, cuenta al jurado Angelina Segundo, "es parte de nosotros mismos; es sagrada. Ahí cosechamos, ahí beben nuestros animales y ahí nos reunimos en las fiestas de Semana Santa".
En su petición, los mazahuas exigen que el TLA recomiende a las autoridades nacionales la aplicación de un plan integral sustentable, la cancelación de la cuarta fase del sistema Cutzamala, el alto al trasvase de las cuencas y el pago de daños ocasionados por la operación del sistema, entre otros puntos.
El arquitecto Jorge Legorreta, quien acompañó al movimiento, enfatizó el despojo histórico que han sufrido las poblaciones aledañas al Cutzamala, mientras que en la cuenca de México se tiene una abundancia de agua que va "impunemente a los drenajes".
El mismo caso se presentó en distintos momentos por organizaciones diferentes. En su turno, la Red Ecologista Autónoma de la Cuenca de México expuso que el trasvase del río Cutzamala contribuye a la fuga de 35 por ciento de agua que se inyecta en las redes de distribución de la cuenca de México, volumen superior al caudal aportado por los sistemas Cutzamala y Lerma.
Beatriz Romero, de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México, precisó que por este trasvase se emiten a la atmósfera 546 mil 875 toneladas de bióxido de carbono, 8 mil 750 toneladas de óxido de azufre, mil 662 toneladas de óxido de nitrógeno y 638.75 toneladas de partículas suspendidas totales, todo esto anualmente.
Miguel Valencia, coordinador general de dicha red, enfatizó que este modelo hidráulico propicia la mercantilización desmedida del agua, altera la matriz aire-agua-suelo y destruye la biodiversidad.
De todos los demandados, entre ellos los gobiernos del Distrito Federal y del estado de México, así como la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, sólo la administración mexiquense envió una carta al TLA que ocasionó risa entre el público asistente.
En la misiva se establece que "en la mística de la nueva administración (del gobernador Enrique Peña Nieto) prevalece la construcción de acuerdos que permite la superación de nuestros problemas, entre ellos los del agua, motivo por el que diferimos nuestra participación".